Estaba muriendo y no sabía cómo explicarlo, estaba muriendo pero deseaba tanto vivir...
[...]
En la vida suceden muchas cosas, cada día algo nuevo se presenta frente a nosotros y en muchas ocasiones no sabemos el por qué de ello, renegamos y maldecimos, preguntando de forma reiterada, "¿por qué yo? ¿Por qué a mi". Peleamos contra la vida de forma voluntaria y certera, deseando poder obtener una respuesta positiva pero no siempre lo logramos y en ocasiones no todos peleamos con el mimo ímpetu.
¿Qué tan importante somos? ¿Qué tanto somos amados? ¿Qué es lo que valemos?
A todo esto nosotros podemos darle respuesta con un valioso significado, sin embargo, a veces debemos partir de forma permanente para que otros nos del el mismo valor.
-¿Me dirás qué es lo que sucede?- preguntó Emma a mi lado -Hace más de quince minutos que trajeron nuestra comida y no la has tocado-
-Sí, debes comer algo- añadió Lea.
-No tengo hambre- respondí -Solo estoy sedienta- mencioné mientras volvía a llenar mi copa de vino.
-¿Es por ese idiota, no es así?- preguntó Emma -¿A caso no le ibas dejar?-
-No es tan sencillo como parece...- suspiré -Cuando te enamores lo comprenderás-
-Me he enamorado y nunca he estado en una patética situación como esta- dijo.
-No a todos nos pasa igual- interrumpí.
-Eres su jodida amante, ¿tan poco amor te tienes?- habló Lea exasperada, golpeando la mesa con la palma de su mano.
-No somos amantes- respondí mirándole.
-Tan solo le falta llevarte a la cama-
-¿Realmente son mis amigas?- pregunté molesta -Porque pareciera que estuviera sentada a la mesa con mis dos enemigas-
-Somos tus amigas- respondió Emma suspirando -Es por eso que te decimos todo esto, queremos lo mejor para ti-
-Y lo mejor según tú es dejar a Jungkook, ¿no es cierto?-
-Te hemos vusto llorar, perderte y volverte a encontrar. Él no ha hecho ni hará nada por ti, no dejará a su esposa- intervino Lea -Por favor, queremos verte bien- suspiró -Además, no tienes edad para esto, estás a nada de cumplir treinta y nueve-
-¿Creen que para mi es fácil?- respondí sintiendo el nudo en mi garganta -¿Creen que yo deseo estar en esta situación? Pues no, no es así-
-Te dio un poco de amor y te aferraste a él con todas tus fuerzas- suspiró Emma -Debes dejarle- murmuró y justo en eso el timbre del apartamento sonó.
Era Jungkoon.
-He venido por ____, es algo tarde y no quiero que se vaya sola- fue lo primero que dijo, él sabía que no era bien recibido por Emma y Lea.
-Está bien, iré por mis cosas- dijo Lea.
-Mejor pide un taxi- interrumpí.
-No tengo problemas con acercarla a casa- dijo Jungkook -Es tu amiga-
-No quiero estar cerca de ella, por lo menos no por lo que queda de esta noche- respondí de igual forma -Es hora de irnos- hablé tomando su mano y haciendo una pequeña reverencia.
Ambos salimos de aquel apartamento sin decir nada más, hasta que nos encontrábamos en la calidez del auto.
-¿Sucede algo?- su voz me sacó de mis pensamientos.
-No es nada- le miré y sonreí.
-Estaba pensando... quizás podríamos ir mañana por comida o quizás ir al cine- mencionó Jungkooj sin apartar su vista del camino y yo, yo me quedé perdida en su perfil. Suspiré.
-¿Por qué no puedes divorciarte?- pregunté.
-¿Disculpa?-
-¿Por qué no puedes hacerlo? Hemos estado juntos por más de dos años y es evidente que no la amas, ¿por qué no puedes divorciarte?-
-No es tan sencillo...-
-¿Crees que es una situación agradable para mi?- pregunté -Dos años de mi vida totalmente desperdiciados, viviendo a la sombra de ella y del falso amor que profesas tenerme-
-____... Yo realmente te amo- el carro se detuvo y su mano tomó la mía -Solo dame un poco más de tiempo, prometo que lo haré. Seré libre y podremos estar juntos- dijo mirando directamente a mis ojos.
-¿Y si no tuviéramos tiempo?- pregunté con dificultan, sintiendo como una caliente lágrima rodaba por mi mejilla.
-¿A qué te refieres?- preguntó con preocupación, barriendo con su pulgar el agua salada que mojaba mi rostro.
-Dices que te de un poco más de tiempo pero no tengo mas tiempo para darte- respondí entre murmullos poco entendibles.
-No te estoy entendiendo nada mi amor- sus manos tomaron mi rostro -Por favor... no llores-
-Voy a morir- dije y sus manos se detuvieron al igual que su respiración quedó atrapada, parecía como si el tiempo se hubiera detenido.
-¿Q-qué? ¿De qué estás hablando?-
-Tengo un tumor cerebral- respondí sin mirarle -Está en su última fase- murmuré y levanté mi rostro cuando un sollozo escapó de sus labios. Su rostro estaba contraído en dolor, sus labios temblaban, sus hermosos ojos grises estaban inundados en lágrimas y su respiración era entrecortada.
-D-dime que es mentira- sollozó con fuerza -P-por favor, dime que no es verdad- pidió y empujó mi cuerpo al suyo, atrapándome en un apretado abrazo. Sus palabras eran intendibles y sus sollozos fuertes, me abracé a él y también di rienda suelta a todo lo que había estado reteniendo las últimas semanas.
¿Ver morir al amor de tu vida? Sin duda alguna ha de ser el peor de los castigos.
-No puedes morir- habló con dificultad -Tú no mi amor, no me hagas esto- podía sentir sus lágrimas empapar mi ropa mientras yo buscaba una forma de aferrarme a él. Mis manos apretaban con fuerza su camisa, intentando encontrar un poco de apoyo.
-Lo siento...-
-¿Por qué te disculpas?- preguntó separándose de mi, su rostro estaba rojo e hinchado. -No tienes nada por qué disculparte mi vida preciosa, al contrario, soy yo el que debe mendigar por tu perdón, por ser tan idiota-
-T-tengo mucho miedo- susurré muy bajito con mis ojos cerrados, sintiendo como pasaba sus dedos con delicadeza por mi rostro.
-Y yo no quiero perderte- susurró de la misma forma -No estoy dispuesto a hacerlo y si he de pelear contra el mismo lucifer, lo haré- suspiré -Hoy mismo firmaré los documentos del divorcio, tú y yo nos iremos- dijo y le miré a los ojos, deseaba creerle, en mi interior quería hacerlo pero la realidad era que se me dificultaba, porque, ¿quién haría algo por alguien que está a punto de morir?
Absolutamente nadie.
YOU ARE READING
ʙᴀɴɢᴛᴀɴ ʀᴇᴀᴄᴛɪᴏɴꜱ 2
FanfictionEl título lo dice todo, tu solo entra y disfruta. Actualizaciones lentas.