24. 29 (MYG)

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Yoongi se encontraba frente a su teléfono, con sus ojos achicados e intentamdo leer los comentarios de letras pequeñas que dejaban sus "fans" en el directo que había comenzado hace más de media hora y yo por mi parte tan solo podía escucharlo y reír, algunas de sus fanáticas lograbar ser bastante chistosas.

-"Yoongi oppa, ¿estarías con una chica diecisiete años menor que tú?"- leyó y me miró discimuladamente. -Ah, creo que deberías ir a estudiar- respondió con una sonrisa ladeada -"Ve y vuelve a la escuela elemental, haz lo que un estudiante debe hacer- terminó de responder antes de buscar sus lentes, realmemte se le dificultaba leer.

-Leeré los últimos comentarios y luego me iré, ¿está bien? Es algo tarde y debo darle de comer a Holly- habló hacia la cámara y luego se acercó un poco más para poder leer. -"Oppa, tengo veintiun años, ¿saldrías conmigo?"- leyó y esta vez una carcajada fue la que abandonó sus labios, haciendo que todo su cuerpo se moviera ante su risa y por ende su cabello se desacomodara un poco -Creo que debes ir a la universidad- respondió alzando una de sus cejas -Dejen de pensar en tanto romance y mejor presten atención a sus estudios, aunque no lo crean son realmente importantes- mencionó sonriendo -Bien chicos, ya debo irme. Fue realmente agradable venir aquí con ustedes. ¡Adios!- agitó su mano suavemente y una gran sonrisa enmarcó su rostro antes de finalizar el live. Quitó sus lentes y me quedó mirando.

-Así que oppa... ¿También debo ir a estudiar?- pregunté con picardía antes de sentarme sobre su regazo, sintiendo de forma inmediata sus manos sobre mi cintura.

-Sí, debes ir a estudiar- respondió sin dejar de mirarme -Pero anatomía, conmigo. ¿Quiéres intentarlo?- preguntó siguiendo el juego y no pude evitar explotar de la risa.

-Amor, realmente eres un caso- dije -No mates las ilusiones de esas chicas de esa forma tan cruel- mencioné y sus brazos me rodearon en un abrazo flojo.

-Ah, esas mocosas deberían de pesar en algo más que en una relación- mencionó con gracia y cierta seriedad a la vez.

-Sí, realmente no sé cómo se le ocurre a alguien de veintinueve o más estar con una chiquilla de diecisiete o menos- apoyé.

-Son personas que se aprovechan de la inmadurez y poca estabilidad de las niñas- respondió encogíendose de hombros.

-Ya lo creo- mencioné antes de besarle la nariz, ahí donde tenía un pequeño lunar -Pero, ¿entonces nosotros somos igual?- pregunté -Me llevas cinco años cariño, ¿también te aprovechaste de mi inocencia?- pregunté con gracia.

-Si hay alguien aquí que se aprovechó de la inocencia del otro, fuiste tú- respondió con ojos enormes y de forma dramática -¡Tú me pervertiste!- medio gruñó con su acento -Incluso tengo tu inicial tatuada sobre el hueso de mi cadera-

-Pero amor... eso lo decidiste tú solito- recordé.

-Porque tú querías y pasaste varios días seduciéndome hasta que lo conseguiste- dijo levantando su mentón de forma orgullosa.

-¡Bah! ¿De qué te quejas? Si cuando fuimos hiciste que me tatuara tu inicial junto a un pequeño gatito sobre mis costillas- expresé -Ambos estamos del mismo lado cariño-

-¿Me dirás que no te gusta?- preguntó acercando mi rostro al suyo -Sé que te gusta, pero te gusta más cuando lo beso o lo delineo con mis dedos-

-No responderé a eso señor Min- respondí antes de inclinarme un poco más y morder una de sus (ahora delgadas) mejillas, suspiré.

-¿Qué ocurre?- preguntó mirando directamente a mia ojos.

-Quiero hablar contigo de algo... pero no sé cómo hacerlo, no soy la más indicada para hablar de ese tema- respondí.

-Déjame juzgar eso a mi, ¿si?- pidió -Venga, dime qué es lo que tanto merodea tu cabeza-

-Bien- suspiré y me senté de forma recta aún sobre él mientras tomaba su rostro entre mis manos -Yoongi, amor, sé que últimamente has venido trabajando duramente en todo lo relacionado a tu música, tus letras y producciones, sin embargo, está esto que me roba la paz y lo hace un poco más cada vez que te veo-

-¿Qué es?- preguntó con interés, acariciando mi cintura sobre la ropa.

-Cariño, no te estás cuidando adecuadamente- murmuré -Es tan poco lo que comes que me asusta un poco y más por los ejercicios que estás realizando últimamente, además de aquello tampoco estás durmiendo, y no me digas que no, lo he notado- le interrumpí antes de que pudiera hablar -Sé que probablemente la causa sea el estrés por todo tu trabajo pero, debes cuidarte ¿bien? Debes estar saludable- mencioné antes de besar su frente -Sé que soy la menos indicada para hablar de esto cuando yo misma ando con mis dietas de mierda y con el ejercicio constante pero... p-pero realmente me preocupo por ti-

-Cariño...-

-Perdón si soy molesta, solo... solo no quiero que se repita lo de hace dos meses- finalicé.

-Hey, todo está bien y no debes preocuparte ¿bien?- habló -Sí, últimamente estoy bajando de peso pero créeme cuando sigo que es de una forma saludable, quizás no me ves comer muy frecuente y eso se debe al poco tiempo que paso aquí por el trabajo pero puedo asegurarte que estoy comiendo un montón- dio a conocer mientras sonreía.

-¿Lo prometes?- pregunté.

-Confía en mi- respondió besando mi frente -Si algo está mal créeme que lo hablaré contigo- señaló -Ahora... ¿cómo es eso de las dietas de mierda?-

-¿Upsi?-

-Amor...-

-Lo siento, de verdad lo hago pero no debes preocuparte- dije -Realmente estoy trabajando en ello-

-____- llamó Yoongi y no me atreví a mirarle -Amor, mírame- pidió y con sus dedos levantó mi rostro -Sabes que nunca te presionaré, así sea que me esté muriendo de la preocupación- mencionó con su ceño fruncido -Pero así como me pides y quieres que yo esté salidable, yo pido lo mismo para ti. Debes estar fuerte y saludable por ti y para ti, y si también me tienes en cuenta pues por mi también- señaló -Eres perfecta tal cual y como eres, yo te amo y amaré así, no debes cambiar absolutamente nada, tampoco debes demostrarle nada a nadie más que no seas tú- suspiró -Si quieres cambiar tu cuerpo puedes hacerlo pero de una forma saludable y para ti, no para los demás-

-No es justo...- murmuré.

-¿Qué no es justo, corazón?- esta vez ambas manos sostenían mi rostro.

-Que me hasgas llorar de esta forma- señalé mi rostro -Mira, mis ojos se está colocando pequeños-

-Bah, tonterías- besó la comisura de mis labios -Te ves perfecta- otro beso más -Siempre eres perfecta- uno más. -¿Quieres dormir un poquito conmigo?- preguntó -Te abrazaré un montón y después comeremos una enorme pizza, de esas que tanto te gusta-

-¿Con bordes de quesito?- pregunté un poco más recostada sobre su pecho.

-Y queso doble- besó mi frente antes de afirmar bien mis muslos y levantarase -Si engordamos, lo haremos y seremos muy felices- murmuró recostandose conmigo en el sofá de su estudio.

-Como tú digas oppa~-

-¡Ya mocosa! Incluso odias esa palabra- mencionó  mientras nos acostaba lo más junto que podíamos, con mi pierna entre las suyas, su brazo sobre mi cintura y mi rostro perdido en la curvatura de su cuello.

-Te amo GiGi- suspiré perdiéndome en los brazos de morfeo.

-Yo te amo más...- fue lo que escuché antes de caer completamente al mundo de los sueño.

ʙᴀɴɢᴛᴀɴ ʀᴇᴀᴄᴛɪᴏɴꜱ 2 Where stories live. Discover now