ʙᴀɴɢᴛᴀɴ ʀᴇᴀᴄᴛɪᴏɴꜱ 2

22. CRUSH (KSJ)

Las festividades de fin de año habían pasado y ahora me encontraba en un acogedor día de playa junto a toda mi familia. Ahg, realmente esyaba feliz de haber vuelto a mi país... así sea por un par de días.

Mi teléfono sonó, era un mensaje de SeokJin.

"Te tengo una sopresa, espérala con ansias"

-¿Una sorpresa?- pregunté en voz alta.

-¿Con quién hablas?- preguntó mi hermano a mi lado, intentando leer lo de mi teléfono.

-¡Yah! No seas chismoso-

-Sé que se trata de un chico- dijo con sus ojos entrecerrados antes de sonreír.

-Madura treitón, actúa de tu edad- respondí sacándole la lengua.

-___, respeta a tu hermano mayor- riñó mamá y le miré con ojos entrecerrados cuando rió -¿Por qué no entras al mar un rato?-

-Sabes que lo odio, además el sol está muy fuerte-

-Esta niña, ¿cuál es la gracia de venir entonces a la playa?- preguntó enarcando su ceja.

-Para alimentar la vista- dije cuando un chico bien parecido cruzó en frente de nosotros.

-Pervertida- dijo -Está bien, cuida las cosas- pidió y solo asentí.

Las horas pasaron y la duda aún rondaba por mi mente, mientras por su parte Jin no quería soltar ni una sola palabra de lo que era su sorpresa.

-Oye hermana...-

-¿Qué sucede?- respondí cuando terminé de atar mi cabello.

-¿Es mi idea o el que conduce ese auto te conoce?- preguntó mi hermano.

-No lo sé y si es así pues no importa- me encogí de hombros y coloqué de forma correcta los lentes que llevaba.

Pasaron un par de minutos más y el carro que mi hermano había mencionado ahora estaba frente a nosotros.

-Emmm, ¿hermana? Creo que es para ti- llamó mi hermano tocando mi hombro.

-¿Eh?- pregunté quitandome los audífonos y lo vi señalar justo frente a mi, bajé mis lentes y ahí esyaba SeokJin.

Jodida mierda, que me trague la tierra.

-Hey... ¿Cómo estás?- saludó desde el asiento del conductor y yo no sabía qué hacer, sentía vergüenza... más por cómo lucía en ese momento. Cabello mál recogido, chanclas, ropa un tanto mojada, rostro relativamente rojo a causa del resplandor del sol y sin una pizca de maquillaje.

-SeokJin- dije después de varios segundos que parecieron minutos -¿Qué haces aquí?- pregunté y el golpe de mi hermano fue a mi nuca -Quiero decir, no sabría que vendrías...-

-Fue algo de último minuto- se encogió de hombros -Quería conocer este lugar, es agradable. Además... quería verte- mencionó con una pequeña sonrisa ladeada en su rostro, el viroteo de mi familia hizo que mi rostro se colocara aún más rojo (si era posible).

-Yo... em..- suspiré -Es muy bueno que estés aquí, me alegra mucho- logré decir.

-También traje a Jungkook conmigo- mencionó y la ventana del asiento de atrás fue bajada.

Doble mierda.

-H-Hola Jungkook- sonreí con algo de vergüenza.

-Hola cuñada- respondió y mis ojos se abrieron.

-Idiota- murmuré por lo bajo y mis ojos una vez se dirigieron a un sonriente SeokJin.

-Te dejo cariño, creo que si no me muevo me llevaré una multa- sonrió -Por favor, llámame cuando estés en casa-

-Lo haré, ve con cuidado, fue muy bueno verte- respondí un tanto más calmada y luego de un par de sonrisas más, el auto se marchó.

-Okay, ¿qué es lo que acaba de pasar?- preguntó mi hermano.

-Nada, no ocurrió nada-

-No nos habías dicho que tenías pareja- esta vez fue la voz de mi padre.

-No es mi pareja papá- suspiré -Es solo un amigo-

-Pues mis ojos vieron otra cosa- mi hermano habló -Y en definitiva le gustas a ese chico-

-Está toda roja- mi madre molestó y una risa colectiva se dejó escuchar.

-¡Yah! Mejor vayamos a casa, quiero ducharme-

-Y llamar a aquel chico- añadió mi hermano por lo bajo, lo miré más no le dije nada, estaba muy avergonzada como para poder hacerlo.

-Solo vayamos a casa- murmuré antes de colocarme nuevamente mis audífonos y caminar un poco más rápido que ellos, intentando controlar el rápido palpitar de mi corazón. Sonreí, a fin de cuentas aquél deseo de año nuevo se había cumplido; había visto a SeokJin y no podía estar más feliz por eso.

-Así que cumpliste tu promesa- murmuré para mi, mientras llevaba mi mano a mi pecho.

El sonido de mi teléfono anunciando un nuevo mensaje se dejó escuchar.

SeokJin

Eres la cosa más preciosa que mis ojos han tenido el placer de ver el día de hoy. Te espero en aquel restaurante del que siempre me has hablado, estaré esperándote a las 8:00 de la noche... necesitamos hablar.

Visto 5:45 pm

Miré aquel mensaje y no pude evitar sonreír una vez más, quizás mi hermano no estaba tan equivocado después de todo.

Aquí les dejo una anécdota que me da mucha vergüenza kshfkalx. Ya me han llegado varios pedidos en los cuales ya estoy trabajando, así que nos vemos este fin de semana.