Tu Presencia es un Sueño en Esta Pesadilla Olvidada por Dios

Capítulo 10: Toque de Dolor

Resumen: Los experimentos continúan; Izuku y Aizawa cambian para siempre.

NOTAS DE LA AUTORA_

ATENCIÓN ESTE CAPÍTULO ES GÁFICO. POR FAVOR LEAN LAS ADVERTENCIAS

Advertencia: Descripción gráfica de tortura, experimentación médica, flashbacks, mención de negligencia infantil y pensamientos suicidas.

Aizawa no estaba seguro de cuántos meses habían pasado desde su secuestro. Fue secuestrado un día de junio, de eso estaba seguro, pero sin ninguna ventana en su celda, no podía notar con precisión cuándo comenzaban los días y cuándo terminaban, se sentía como si hubieran sido años, aunque sabía que no habían pasado más de algunos meses.

Los días eran más llevaderos ahora que cuando lo habían llevado por primera vez. El dolor en su pecho cada vez que pensaba en su esposo y gatos había disminuido ligeramente (nunca desapareció verdaderamente) y el miedo y desesperación que lo habían consumido al principio era más manejable. Tal vez se estaba ajustando a sus alrededores. O tal vez se estaba volviendo inmune; era difícil de decir.

Por supuesto, ahí fue cuando los experimentos cambiaron.

Después de que Izuku y Aizawa e Izuku se hubieron recuperado de sus reuniones con Overhaul, habían sido dejados principalmente solos por el Doctor. Había algunas 'examinaciones' de vez en cuando, pero nada realmente debilitante o que dejara muchas cicatrices. La calma era... desconcertante. Era obvio que estaban trabajando en algo, preparándose para- bueno, Aizawa no sabía qué.

Hasta ese día, claro.

Normalmente Aizawa e Izuku se despertaban alrededor de la misma hora (Aizawa siempre despertaba de primero) y más o menos una hora después, dos bandejas de comida eran deslizadas bajo la puerta para que comieran. Esta mañana, sin embargo, no hubo comida. En cambio, la puerta se abrió completamente, revelando a los tres guardaespaldas que siempre acompañaban al Doctor.

Aizawa e Izuku estaban a mitad de la planeación de futuras lecciones de combate (usando lengua de señas) cuando se detuvieron abruptamente, sorprendidos por la entrada repentina. Aizawa se levantó inmediatamente de su lugar en el piso, listo para posicionarse entre Izuku y los guardias. Su cuerpo estaba tenso, preparado para entrar en acción en cualquier momento. Izuku reaccionó de forma similar, de pie instantáneamente frente a la litera y bajó ligeramente posicionándose en una postura de combate.

Nadie se movió. Los guardias no los atacaron ni nada- simplemente esperaban, mirándolos con impaciencia. Aizawa sabía que lo que fuera que tenían planeado sería malo. Muy, muy malo. Observó de reojo a Izuku. El chico estaba listo para pelear, listo para seguir a Aizawa a donde fuera. No hizo sentir mejor a Aizawa, sabiéndolo. Él... él no podía poner en riesgo a Izuku de esa forma. En una pelea entre él y los tres guardias, Aizawa no estaba seguro de poder ganar, mucho menos proteger a Izuku en el proceso.