🐺Eleven🐺

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JiMin estaba triste, decaído y casi en depresión.

Su Omega se retorcía con dolor.

YoonGi curaba sus heridas de la noche anterior y miró su telefono, suspiró y decidió enviarle mensaje a JiMin. Su lobo se agitaba preocupado.

"Omega... ¿nene, estás bien? Dime algo... te siento dolido..."

" Alfa... ¿me quieres?"

"Te amo, precioso... ¿por qué me lo preguntas?"

"Estoy solo, Alfa... tengo miedo de que me dejes... mi humano cree que nos has rechazado..."

"No, claro que no, eres mi mejor regalo... no te he rechazado"

YoonGi escribió y espero que JiMin lo leyera.

2:30 am
Alfa temporal
Hola, JiMinnie...
Quería saber cómo estabas, me quedé hasta tarde haciendo un trabajo...

JiMin escuchó que una notificación cayó, y tomó su telefono, al ver al remitente comenzó a llorar. Pensó que todo estaba perdido... y la ilusión volvió a latir en su acongojado corazón.

"Alfa... estoy triste... ¿puedes venir?"

"¡Oh, mi amor! Yo soluciono esto..."

YoonGi tomó su chaqueta, y revisó su cara, no quería asustar a JiMin, los golpes ya no estaban inflamados y la base del maquillaje cubría el tono rojizo de cada uno, su camisa mangalarga y su cabello desordenado cubierto por una gorra negra. Tomó su mochila, metió su billetera, los cuadernos del siguiente día, un cambio de ropa, su libro, su cargador y su telefono... tomó las llaves y salió de su habitación con el minimo ruido.

Bajó cada escalón, y miró a su tío inconsiente. A estas alturas le daba lástima... él ni siquiera entendía porque ya no le afectaba casi verlo entrar en un coma etilico.

Salió y el frío le hizo estremecer. Caminó rápido y entró a una tienda de convivencia, agradeció que hubiera una de paso hasta el edificio dónde JiMin vivía.

YoonGi miraba todas las cosas en los estantes y no sabía que tomar.

"A nuestro Omega le gustan los dulces, pero las papitas están bien... le gusta la leche con chocolate, y los sandwiches con mantequilla..."

YoonGi tomó una bolsa de pan, un paquete de frituras, helado de fresa con chocolate amargo, algunas latas de chocolatada y de paso, un par de vendas para él. Fue a caja y pagó con la tarjeta que su madre Omega le había dado en caso de emergencia, su mamá le había dicho que era lo único que podía hacer por él, que confiara en su madre Alfa... pero ella ya no estaba tampoco...

Pero volviendo con JiMin, la salud de su Omega era una emergencia. Esa tarjeta era lo único que su tío no le había quitado...

Salió con dos bolsas en mano, y se dirigió al apartamento del menor.

Cuándo JiMin escuchó el timbre, se asustó pero reconoció el aroma, abrió la puerta sin dudarlo y se lanzó para abrazar el cuerpo de YoonGi, haciendolo tambalear un poco, YoonGi le abrazó con un solo brazo y dejó que el aroma dulce de JiMin lo relajara.

Olvidó el dolor de los golpes sin razón, y entró con JiMin refugiado entre sus brazos. YoonGi dejó las cosas que llevaba en la mesa, y se quedó con JiMin en silencio.

Con preguntas y respuestas sin decir, ninguno quiso decir nada, solo quedaron en silencio...

- No me respondiste...- YoonGi le susurra- Estaba preocupado, por ti... mi lobo insistió en que debía venir a verte...

JiMin sintió el sonrojo invadir su rostro, pero no se apartó. Su corazón latió apresurado por la confesión de YoonGi y no le importó más que lo que sentía en ese momento.

- ¿Quieres comer algo?- YoonGi le pregunta y JiMin asiente, el Alfa deja su mochila sobre el sofá. JiMin se separa un poco y le deja hacer lo que sea.

- Iré a cambiarme... uh... ponte cómodo- sus palabras son presas de nerviosismo y corre hasta su habitación, tenía que quitarse esa ropa, y se puso un camisa ligera que seguía cubriendo su marca.

"Su Alfa estaba preocupado por mí..."

"¡Claro, Alfa nos quiere!"

"Nos quiere... quiere protegernos, yo lo quiero..."

JiMin sonríe y presiona sus mejillas, está muy rojo y sonriendo cómo tonto. Mira su cabello y lo arregla un poco, sale de su habitación y vuelve a la sala, puede ver la espalda de YoonGi mientras cocina.

- Ya regresé... ¿puedo ayudar?- pregunta y YoonGi solo niega sonriendo.

- Esta bien... he terminado- dice el Alfa y JiMin se queda sorprendido de ver lo que YoonGi ha hecho al estar preocupado. Hay rodajas de pan llenos de mantequilla, y chocolate tibio, galletas... se siente cortejado...

Se sientan y comen... en silencio, JiMin quiere decir algo, pero no sabe qué.

- Estoy mejor...- su susurro fue bajito y YoonGi le miró con una profunda mirada. Se sentía mejor cuidando del Omega, y su lobo se encontraba tranquilo de estar junto a su mate.

- Me alegra... yo...- YoonGi tose falsamente y le mira- Si no te molesta, me quedaré contigo hoy... mañana voy a clases temprano, pero no puedo dejarte solo... mi lobo no me dejaría...

JiMin asintió.

El resto de la comida fue pacífica.

Al momento de dormir, YoonGi se cambió su jeans por un pantalón de algodón. YoonGi se dirigía al cuarto que había usado, pero JiMin tomó su brazo.

- Por favor...- JiMin se acercó y YoonGi le miró.

- JiMin...

- Me estoy volviendo loco...- el menor le confiesa- Me ilusiono contigo... y no está bien, se supone que eres mi Alfa temporal...

- Yo también...- JiMin le mira- No debería, quizás solo esté confundido, pero mi lobo se emociona al estar contigo, y a veces... solo quiero...- su vista cayó sobre los labios del Omega.

- ¿Qué quieres...?- el Omega se acercó al punto que sus respiraciones se mezclaban.

YoonGi no pudo negar que el Omega era hermoso y simplemente lo sujeta de la cintura y le besa...

Ya no pudo resisitirse, no cuando el aroma del Omega lo llamaba, no cuando su lobo se aferraba a su compañero, no cuando su corazón latía tan rápido.

Alzó el delicado cuerpo de su mate, y lo llevó dentro de la habitación, su cuerpo cubría el cuerpo de JiMin, al estar acostados en la cama...

JiMin sujetaba la camisa del Alfa, desesperado por tenerlo cerca. Sus besos eran cálidos... sin llegar a más de eso...

- ¿No harás cómo si esto no pasó?- JiMin pregunta luego de quedarse sin aliento.

- No, cariño...- YoonGi niega levemente.- Esto... nosotros, será así todo el tiempo que quieras... y la luna nos deje estar juntos...

¿Alfa temporal?Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora