Jennie una estudiante normal como cualquier otra, pero todos los viernes sin falta seguramente estaría matando algún delincuente en su sótano.
Lisa una chica que ha sufrido gran parte de su vida, parte de uno de los clanes más grandes, por casualida...
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Ver a Lisa inconsciente en sus brazos la dejó en shock, sentía la piel fría y escuchaba todo difuso... Nisiquiera se había dado cuenta de en qué momento había llegado Rosé. Lisa, habían lastimado a Lisa bajo su cuidado, eso era algo que nunca debió haber pasado... Ya había sufrido suficiente.
Rosé estaba diciendo algo pero no la podía escuchar, solo podía pensar en lo jodidamente estúpida que había sido por dejarla sola y en lo jodidamente estúpida que había sido ella al confiar en Rosé.
- No está muerta ¿Me escuchas?
Sacudió la cabeza y regresó a la realidad, saber que estaba viva había sido suficiente para sacarla del trance en el que se encontraba.
- ¿Entonces por qué demonios no despierta?
- ¿No me escuchaste? - Repitió la menor un tanto preocupada por el reciente estado de su amiga - Le inyectó algo - Añadió y meneo una jeringa que probablemente había sacado de la ropa del chico.
- ¿Qué le inyectó?
- Pues no tengo idea - Le pasó la jeringa vacía para que lo analizará con sus propios ojos - Pero necesitamos conseguir muchos de estos.
Trato de pararse pero al instante sintió un tremendo ardor en su costado, cierto, le habían abierto la herida.
- Déjame llevarla a su esquina - Dijo Rosé y Jennie la dejó tomar a la menor, no estaba muerta... Probablemente le habían inyectado un somnífero o algo por el estilo así que en algún momento iba a despertar.
- Mejor llévala a mi habitación.
Y así lo hizo.
No estaba muerta, eso era obvio ¿Pero por qué verla tumbarse así tan repentinamente contra el piso la había puesto tan mal? No tenía sentido, ella usualmente se deja guiar por la lógica más que por lo sentimental, pero eso no había pasado recién.
Ya nisiquiera estaba molesta con Rosé a punto de querer matarla, incluso le daba igual la presencia de Jisoo en este momento, solo quería concentrarse en pensar que demonios acababa de pasar y no se refería a querer averiguar por qué le puso tan mal ver así a Lisa.
Había otra cosa que le preocupaba más ¿Quién demonios era ese chico? Había mencionado algo sobre una familia así que ¿Realmente pertenecía a "esa" familia? ¿Entonces sabían dónde estaban? ¿Van a regresar? Quizá tardarían unos dos días o tres, máximo en notar la ausencia del estúpido que acababa de matar, pero ¿Ahora qué? ¿Qué debería hacer? Ya tenía suficiente con la estúpida familia de Jisoo ¿Ahora también tenía que lidiar con asquerosos pandilleros? ¿Cuántos eran? ¿8? Podía con 8.
En otras circunstancias simplemente se habría mudado a algún lugar alejado pero ahora con todo eso de Jisoo eso se vería por demás sospechoso y lo que menos quería era otro problema más... ¿Matar a Jisoo? Claro que era la solución, podían deshacerse del cadáver, quedarse un par de días respondiendo preguntas y después quizá irse a otro país donde la policía no le jodería con preguntas ¿Quizá sudamérica? Podría irse con Lisa y agh, quizá también tendría que llevarse a Rosé para asegurarse de que no arruinara el plan.
