44- Un disfraz. Parte II

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Lucas Williams.

Me miro al espejo del baño sintiendo la ira recorrerme.

Amor

Así le dijo, la muy cínica. Luego de besarme, luego de correrse en mis dedos hace esto. Sé lo que nos prometimos, pero es jodidamente difícil, verlo con él, verla sonreírle, lo odio joder, odio verlos juntos.

Tomé una inspiración profunda para calmar todas las jodidas sensaciones que tengo y la horrible calentura que me dejó besar y tocar a Emma. Esto es una mierda, y traer a Lisa solo empeora todo mucho más. Tener a Emma celosa, cabreada y caliente no es una buena combinación la verdad.

Arreglo el horrible atuendo que escogió Lisa para ambos, sintiéndome totalmente estúpido, ni tiempo me dio de decirle que no quería vestirme como un imbécil apresado, simplemente me dio igual la mierda que escogiera, ni quería venir, pero ya era una fiesta que estaba planificada desde hace mucho por los Williams, así que… A la mierda, espero la noche no empeore más.

Salgo de la habitación, pasando por el pasillo oscuro mirando a las mismas parejas devorándose mutuamente que vi cuando me adentré en aquel cuarto. La fiesta parece que va evolucionando porque se percibe en el ambiente el desenfreno, la euforia y la lujuria, nada parecido a lo sofisticado y elegante de cuando empezó, me pregunto si Cody habrá agregado de las mierdas que consumía a las bebidas.

— ¡Amor! ¿Dónde estabas? Tengo un par de minutos buscándote, ya casi empieza el concurso de disfraces, te recuerdo solo estamos participando tus amigos y nosotros, debemos estar. —miré sin emoción alguna a Lisa y seguí mi camino sin responderle.

—Lucas joder, ¿me puedes responder y dejar de ser tan idiota? —me estaba colmando la paciencia ya.

Fui directo a la barra, pedí un shot fuerte de cualquier licor, me hicieron una combinación de tres licores que llevaba por nombre “Calor y vida”, me tomé tres shot sin detenerme si quiera a preguntar qué licores tenía, pero al beberlos sentí como me quemaba hasta el último lugar del cuerpo.

—Estuvo bueno el shot, pero más rica está ella. —murmuré con una sonrisa imbécil en el rostro.

— ¡Lucas! —volvió a gritar Lisa en medio de tanto ruido y desorden.

Caminé directo a la pista de baile y empecé a moverme al ritmo de Wiggle de Jason Derulo. Una chica rubia me miró con picardía y no le negué nada cuando se acercó a bailar conmigo. Podía ver a Lisa moverse entre la gente para tratar de llegar a mí y me sentía ido mientras la chica se pegaba y se contoneaba contra mí.

— ¡Maldita sea Lucas! —Lisa empujó a la chica lejos de mí y me tomó del brazo llevándome con ella al pasillo con dirección al baño.

Me reía a sonoras carcajadas y Lisa estaba roja de la rabia e histérica. Gritando y dando manotazos, recordándome que soy un hijo de puta y bla, bla, bla…

—Ya cállate. —dije finalmente.

Una bofetada me giró el rostro y aun así me reí a sonoras carcajadas. Maldito alcohol.

—Te pregunté que donde estuviste todo el tiempo y no me respondiste, amor esto no puede seguir así… —de la nada empezó a llorar y simplemente ni sabía qué hacer.

—Estaba intentando follarme a Emma. —solté y me encogí de hombros.

Su rostro se transformó de un momento a otro, y estaba tan roja que pensé se le iba a subir la presión.

—Adiós.

Me alejé de ella volviendo por el pasillo para ir al círculo que estaban creando los que dicen ser mis amigos, pero de la nada una voz me detuvo, o mejor dicho dos voces me detuvieron, no hablaban conmigo, pero su conversación me hizo encender mis alarmas.

Mi Amado Problema. (Problemáticos #2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora