MATRIMONIO POR CONTRATO

CAPITULO 5: LUNA DE MIEL AMARGA

MATRIMONIO POR CONTRATO
CAPITULO 5
POR RUI

Llegaron a su destino por la mañana antes de que saliera el sol, un auto fue por ellos para llevarlos hasta su hotel de cinco estrellas.

- WOW es impresionante. Exclamo con una voz infantil Emily.

- Verdad que si, nunca me canso de admirarlo. Le respondió Gerardo con una sonrisa viendo la cara de asombro de la joven.

- Hay mejores hoteles. Aron rompió el momento con su frialdad.

- Ahss... Emily cruzo los brazos e hizo una mueca.

- Aron no arruines el momento, es la primera vez que Emily...

- Descuida Gerardo, olvide que debo comportarme.

- No Emily...

- Entremos, tengo que prepararme para la reunión. Termino por decir Aron, pues ingreso rápido al hotel. El botón los esperaba para llevarlos a su habitación.

Aron entro sin decir más y tomó la recámara más grande cerró la puerta y no dijo más.

- Descuida siempre es así cuando esta estresado.

- Como lo soportas.

- Te acostumbras.

- Creo que no podré hacerlo... Por cierto gracias por la ropa es muy bonita y es de mi talla.

- Me alegra de que te gustará. Compré un poco de todo, las demás maletas están aquí.

- Todas esas son mías?

- Si, hay ropa, zapatos, maquillaje y demás cosas que creo que necesitarás.

- Eres muy atento.

- Solo lo mejor para la señora De Gamboa.

- Eres demasiado amable conmigo.

Gerardo se acercó a ella y acomodo un mechón de su cabello ella se sintió un poco incómoda y dio un paso atrás. Gerardo alzó la mirada y detrás estaba Aron mirándolo con cierto enojo.

- Emily, tendré una reunión puede que tarde toda la mañana, si gustas puedes dormir y si te da hambre puedes pedir lo que sea, todo que se cargue a mi tarjeta. Pero por favor no salgas sola del hotel, no conoces la ciudad y puedes perderte.

- "Vaya que diferencia, me habla como si deberás le preocupara" - pensó, luego respondió. - Estoy cansada creo que dormiré un rato.

- Estás reuniones tardan mucho, si te aburres puedes ir a la alberca del hotel.

- Gracias Gerardo!

- Pero no tienes traje, puedes comprarlo en la tienda del hotel.

- No, no es necesario, encontrarás algunos trajes de baño en las maletas.

- Si que piensas en todo.

- Es mi trabajo.

- Bien, es hora de irnos, andando Gerardo.

- Cuídense! Ella los despidió.

- Tu también. Ambos respondieron, uno lo hizo con una gran sonrisa y otro solo por compromiso.

Después de dormir por tres horas Emily despertó y pidió servicio al cuarto, había pasado otras dos horas, aburrida decidió bajar a la piscina, buscó en su maleta y encontró un hermoso traje de baño de una pieza en color azul marino, tomo una bolsa coloco bloqueador, lentes de sol, sandalias y bajó.

Estuvo en la alberca disfrutando del sol del medio día, el traje la hacía lucir bien, aunque no tenía curvas pronunciadas había algo en su personalidad que atraía la mirada de todos a su alrededor.