Capítulo 11.

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Yahwi y Caín finalmente salieron luego de un rato de mimos, y caricias, se lavaron y cambiaron de nuevo. Yahwi miró sus ropas algo desgastadas, aunque las lavaba lo más que podía y trataba de no arruinarlas era imposible.

Se estaban quedando sin tiempo.

Caín fue a limpiar como podía la cueva puesto que habían dejado un gran desorden y Yahwi fue en busca de Phill quien llegó en seguida.

— Phill.

— ¿Ya terminaron de hacer sus puercadas? — Preguntó Phill con ojeras.

El Omega puso los ojos en blanco. — Primero que nada, buenos días.

— No tiene nada de buenos, no pude dormir una mierda. — Vocifero con algo de molestia mientras movía sus cabellos alborotados.

— ¿Eh?¿Por qué?

— ¡¿Y aún lo preguntas?! Dormí cerca de la cueva así que escuché todos tus...  Gemidos. — Dijo avergonzado y mirando a otro lado, Yahwi se sonrojó. — ¿Estás bien? Digo... ¿Tu culo aún está bien?¿Puede cerrarse?

— ¡Claro que sí!¿¡Que clase de pregunta es esa?! — Chilló.

El beta soltó una carcajada. — Yo solo quería asegurarme...

Ambos se quedaron mirando un buen rato fijamente como si de un juego de miradas se tratase.

— ¿Que?

— Veo que si te dió duro contra el muro, macizo contra el piso, sin consuelo en el suelo....

— ¡PHILL!

Rápidamente volvió a reírse a carcajadas sin poder parar, Yahwi le miró de mala gana.

— Oye Yahwi... No tendré sobrinos ¿Verdad?

El Omega frunció el entrecejo. — ¿Que quieres decir?

— Ya sabes, no hay condones ni supresores para el celo... — Murmuró algo preocupado el beta.

— Caín es muy cuidadoso con mi cuerpo, no se ha corrido dentro ni una sola vez desde que nos acostamos en la primera ocasión. — Yahwi hizo una mueca sintiendo una leve decepción pero Rápidamente la apartó. — Así que no.

— Vaya, yo también quiero un hombre así de atento.

El pelinegro rodó los ojos y rápidamente cambio de tema.

— ¿Y que pasó con Jooin?

— Ah, ese fue otro problema. — Removió sus cabellos rubios notandose aún más cansado. — Como también entró en celo estaba muy desesperado por estar contigo, no se calmaba con nada y estaba muy violento.

Yahwi palideció. — ¿Te hizo daño?

— Afortunadamente no, no me mató gracias al cielo. Y como Caín lo amarró entonces fue más fácil de llevar.

— ¿Cómo lo calmaste?

— Le pegué en la cabeza con un palo, luego lo amarré contra un árbol con una soga que encontré y lo dejé ahí. — Suspiró lleno de arrogancia, había logrado una hazaña. — Fue un grano en el culo, sus gruñidos se escuchaban por todos lados a pesar de que lo deje lejos.

Yahwi respiró algo tranquilo. — Gracias Phill, y bien... ¿Donde lo dejaste?

Todo se quedó en silencio por unos breves minutos, ambos se miraban si decir nada.

— Oh, bueno... ¿Creo que en alguna parte de la selva?

— Espera.. ¿Que clase de respuesta es esa?

Dulce Cautivo. [Cahwi]Where stories live. Discover now