42. Beth

608 47 3
                                    

Rachel: Pasame más clavos —le pedí a Carl, lo hizo.

Seguí clavando las tablas en las ventanas de la iglesia, tenemos que dejarla reforzada y segura para quienes se quedarán.

Mi persona menos favorita, por el momento, regreso en la noche pero sin Carol y con un chico desconocido.

Dijo que ya sabe donde está Beth y que ahora tiene a Carol, él chico, Noah, huyó con ayuda de Beth.

Ahora nos preparamos para ir por ellas, Michonne se quedará con Carl, Judith y Gabriel.

Rachel: Ya quedó —nos alejamos.

Mire a mi derecha, vi a Daryl viéndonos y de inmediato aparte la mirada.

Carl: ¿Ocurrió algo entre ustedes? —lo mire.

Rachel: No ocurre nada —comenzamos a caminar —. Habla por la radio si ocurren problemas, ¿de acuerdo?

Carl: De acuerdo —llegamos a la entrada de la iglesia.

Rachel: Hey —lo tomé de los hombros para abrazarlo —. Mantente a salvo y a Judith.

Carl: Tú también mantente a salvo —nos miramos —. Te quiero, Rach.

Rachel: Tambien te quiero enano, bueno, no tan enano. Maldición, deja de crecer —reímos.

Entramos a la iglesia, papá se acercó con Judith en brazos. Me acerque y le di un beso en la frente a Jude.

Rachel: Volveremos pronto, lo prometo —le dije.

Me aleje para que papá diera a Judith a Michonne, me acerque a ella.

Rachel: Cuidalos, por favor —ella asintió.

Michonne: Lo haré, no dudes de eso —sonreí —. ¿Estas bien para hacer esto?

Rachel: Lo hago por Maggie, no por ellos —le dije —. Estoy bien.

Rick: Volveremos pronto —le dijo a Carl.

Carl: Lo sé —le di un último beso en la frente a Judith, salí del lugar.

Al cerrar las puertas escuchamos el llanto de Judith, suspiré y baje los escalones.

Clavamos los últimos tubos del piano que hay en la iglesia, fuimos hacia el camión.

Subimos al camión, me acerque al asiento del copiloto. Se donde queda el lugar donde las tienes.

Es en el Grady Memorial, mi segunda opción si en el Chastain no me aceptaba.

Rick: ¿Lista? —mire por la ventana.

Mordí mi pulgar y apoye mi codo en la puerta, papá es quien conduce y los demás van atrás.

Será extraño volver a Atlanta, a la ciudad me refiero, la última vez casi explotamos.

Ahora que lo pienso, ¿que habrá pasado con mis compañeros de trabajo?

Hace mucho no pienso en Conrad.

Rick: ¿En qué piensas? —suspiré.

Es mi padre, a él no podré evitarlo para siembre.

Rachel: En mis compañeros de trabajo —dije indiferente —. Conrad, Bell, Devon, etc… No importa.

Rick: ¿Cuál era la especialidad de Conrad? —me preguntó.

Rachel: Quería ser jefe de cardiologia —le dije —. El idiota tenía ambiciones.

Sonreí un poco. Aún recuerdo cuando conocí a Conrad, lo primero que me dijo es que tengo buen trasero. Lo mande al demonio, pero luego lo fui conociendo y es agradable.

ℰ𝓁 𝒞𝒶𝓏𝒶𝒹ℴ𝓇 𝒴 ℒ𝒶 𝒞𝒽𝒾𝒸𝒶 𝒢𝓇𝒾𝓂ℯ𝓈Where stories live. Discover now