Capítulo 7.

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AL DÍA SIGUIENTE.

Jungkook palmeó la cama en busca del rubio, sacó la cara de las almohadas encontrando su costado vacío.

Hyunjin se había ido.

El pelinegro se sentó en la cama en posición fetal mientras abrazaba sus piernas desnudas, varias lágrimas se deslizaban por sus mejillas. —Volviste a dejarme... —Jungkook revolvió su cabello mientras lloraba. —¿Por qué te sigo perdonando? Se acabó, estoy harto de esto.

Jungkook se levantó de la cama aún sollozando comenzó a vestirse con rápidez.

Salió de la habitación, al llegar a la sala vió aquel fajo de billetes, sintiéndose peor, pues solo eran migajas; mismas migajas que él seguía aceptando.

Frustrado lanzó el dinero al suelo con ira, no podía soportar esto más tiempo.

Tragándose sus sollozos salió de su casa, miró la hora en su reloj, aunque era más de medio día, aún tenía tiempo para llegar a aquel lugar.

Sacó su celular y marcó el número de su amigo. —Hola Jimin, ¿Podrías quedarte unas horas más con Juhyun?

—Si, está bien, él está durmiendo profundamente, puedes venir por él en la noche.

—Gracias, enserio.

—No te preocupes, ¿Irás a ese lugar, no?

—Si, acabaré con esto de una vez por todas.

—Suerte.

—Gracias, Jimin, adiós.

Jungkook detuvo un taxi y lo abordó mientras le indicaba el lugar a donde iba.

Rápidamente llegó.

El pelinegro se bajó del taxi, al entrar a aquel edificio se encontró con esa desagradable mujer.

—Al fin llegas, pensé que no vendrías. —La madre de Hyunjin se acercó al pelinegro.

Jungkook respiró profundo. —Acabemos con esto, tengo cosas que hacer.

—¿Prostituirte, por ejemplo?

Jungkook tensó la mandíbula. —No es su asunto, solo dígame qué debo firmar.

—Bien, sígueme.

El pelinegro siguió a la madre de Hyunjin hasta un despacho, dónde los esperaba el abogado de la familia Hwang.

—Por favor, tome asiento. —Pidió amablemente el hombre.

Jungkook se sentó mirándolo expectante, aquel hombre le extendió varios documentos mientras le explicaba detalladamente que iba a firmar y a que iba a renunciar.

—¿Aqui dice que si firmo el divorcio automáticamente le retiran el apellido Hwang a mi hijo?

—Así es, son clausulas solicitadas por la señora Hwang.

Jungkook bufó. —Es una hija de puta, ¿lo sabía? —El pelinegro dirigió su mirada a la señora Hwang que lo miraba con una gran sonrisa en su rostro.

—Puedes insultarme todo lo que quieras, pero jamás dejaría que mi hijo siguiera casado con un prostituto y que un hijo bastardo tuviera nuestro prestigioso apellido.

Jungkook tensó la mandíbula, miro aquel papel y lo firmo con rápidez, se lo entregó al abogado, para luego levantarse de su silla.

Caminó hasta donde estaba la señora Hwang y le dió una fuerte bofetada. —Espero que usted y toda su familia se vayan al infierno con su dinero y su asqueroso apellido, porque mi hijo y yo no lo necesitamos. —El pelinegro camino hasta la puerta, pero se detuvo antes de irse. —Ah, y dígale a su hijo que no vuelva a buscarme y a MI hijo tampoco, porque si vuelvo a ver su descarado rostro de nuevo, juro que lo asesinaré. —Y sin más el pelinegro siguió su rumbo ignorando los gritos e insultos por parte de aquella mujer.

Papá por accidente || Taekook Where stories live. Discover now