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Semanas después....




Taeyong estaba feliz. Estaba feliz de que ya no tendría que vivir con el temor de que le quitaran a sus hijos. Tenía una familia completa con Jaehyun y sus tres hijos. ¿Qué más podría pedir?
Pero... siempre hay un pero.

Taeyong miró fijamente la carta que tenía enfrente. Lo leyó y lo releyó de nuevo antes de devolverlo al
sobre blanco en el que venía.

Se suponía que debía estar feliz, estaba feliz pero
también estaba en conflicto. Parecía una buena
oportunidad. Un trabajo bien pagado en la costa
y un lugar perfecto para su familia.

Había buscado en Google el lugar y descubrió que
el lugar era el mejor. Lejos de la ciudad en una pequeña rica ciudad en desarrollo un hogar de las playas de arena. Su oferta de trabajo fue aún más lucrativa. La empresa proporcionó un salario bien remunerado y vivienda. Una buena casa que pagaría poco a poco con las pequeñas deducciones de su salario y aun así le alcanzaría para pagar las cuotas de los niños, las facturas y los ahorros.

Haechan y Tiana se iban a la universidad y Ning, Jaehyun y él se irían. Pero eso significaría que dejaría mucho atrás. El lugar era la casa de Jaehyun, tenía un buen trabajo allí y una base sólida, pero para Taeyong su futuro estable no estaba en la ciudad sino lejos de eso.

Quería un nuevo comienzo si Jaehyun pudiera
aceptar acompañarlo.
Fue arrastrado de sus pensamientos por el repentino ruido en la casa. Los niños deben haber regresado. Se habían vuelto más cercanos en las últimas semanas. El tiempo vuela, ¿no? Ahora eran inseparables.

"Todavía no apruebo esa relación tuya". Sip, ese era Haechan.

"Es porque no conoces a Juyeon tan bien como yo. Es un buen tipo". Respondió Tiana.

No era un fenómeno nuevo en la casa, Dios sabe que la pobre chica siempre estaba luchando con uñas y dientes por su relación todos los días.

"¿Quieres decir que detrás de las chaquetas de cuero, la adicción a fumar, los piercings y la vibra de gángster hay un chico suave que no te romperá el corazón a la menor oportunidad que tenga?" preguntó Haechan siguiendo a su hermana a la cocina.

"Lo está intentando y eso es todo lo que importa". Odiaba el tema tanto como odiaba la escuela, probablemente porque detrás de todas las defensas para ambas situaciones había algo de verdad. La escuela era importante, triste pero cierto. ¿Era tóxica su relación? No hubo respuesta.

"Buenas tardes a ustedes dos. ¿Recibieron los trajes?" preguntó Taeyong entrando a la cocina.

"Sí y a un buen precio también". Haechan respondió y Tiana simplemente tarareó en acuerdo mientras se metía un poco de mantequilla de maní y galletas en su boca.

"¿Dónde está Ning?"

"Salió con Jaehyun, fueron a comprar algunos ingredientes para la cena pero conociéndolos debieron pasar primero por la sala de juegos". Taeyong respondió.

"Míralos entrar aquí tarde en la noche, con sólo la mitad de las compras en la lista"..

Era obvio que eso sucedería. Por eso Taeyong prefería ir de compras solo, Tiana simplemente era demasiado perezosa para ir, Haechan se perdía en el camino, Jae y Ning desaparecían para ir a sus pequeñas aventuras y si iba con todos ellos entonces hola compra impulsiva y adiós a su dinero.








Después de una cena maravillosa, todos se retiran temprano a la cama sabiendo que les espera un largo día al día siguiente.


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Club De Padres - Jaeyong Donde viven las historias. Descúbrelo ahora