Capítulo 1: ¡Maldito Sistema! ¡Maldito Destino!

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[Código de activación: "¡Quiero A Mi Esposo De Vuelta!". El Sistema se activó automáticamente.]

Shen Yuan se sintió flotar en un vacío. Tan oscuro que no podía ver ni la punta de su nariz, escuchando una voz viniendo desde todas las direcciones, una voz que le era en extremo conocida.

[Bienvenido al Sistema. Este sistema funciona según el concepto de diseño "Obtén tu final feliz". Esperamos brindarle la mejor experiencia posible. Es nuestro sincero deseo que, durante su experiencia, usted pueda cumplir su voluntad y, según sus deseos, recuperar el final feliz que obtuvo el usuario con anterioridad ¡Esperamos que lo disfrute!]

En medio del vértigo los recuerdos fueron llegando. Columnas de secuencias de código desvaneciendo todo a su paso, los gritos y llantos de sus discípulos, los rostros de todos sus conocidos y seres queridos frente al inminente final... Luo Binghe.

Shen Yuan se levantó gritando, abriendo los ojos de golpe y agitando sus brazos en el aire.

Era como si tratara de aferrarse a algo. Como si quisiera alcanzar a alguien.

A su lado, Yue Qingyuan y Mu Qingfang se incorporaron inmediatamente del lugar donde estaban sentados. El desconcierto y terror les invadió al ver la reacción enloquecida de su hermano marcial.

- ¡Xiao Jiu! ¡Despierta, soy yo! - exclamó Yue Qingyuan siendo el primero en reaccionar, corriendo al lado de su shidi para sostenerlo por los hombros y presionándolo contra el colchón en un intento por frenar sus bruscos movimientos. Al ver que seguía retorciéndose empezó a entrar en pánico. - ¡Xiao Jiu!

- ¡No lo sueltes! - llegó Mu Qingfang colocando sus manos sobre los meridianos de su shixiong para transmitirle energía espiritual. - ¡Hay que estabilizarlo o sufrirá otra desviación de Qi!

Ante las palabras de advertencia del doctor el Líder de Secta se tensó. Ejerció aún más firmeza en su agarre, sin ser del todo agresivo, solo ejerciendo la fuerza necesaria para permitir al otro regular el qi de su shidi sin que este pudiera oponer resistencia.

Mientras aquello ocurría Shen Yuan trataba de ordenar su mente, luchando por huir de las terribles imágenes que aparecían una y otra vez en su cabeza. Tras lo que pareció una eternidad al fin logró despejar por completo su mente, sintiendo su qi reestablecerse, lo que lo hizo dejar de luchar. Creyó escuchar unos suspiros de alivio; pero los ignoró estando más concentrado en normalizar su agitada respiración.

Parpadeó varias veces esperando que la escena ante él dejara de ser un borroso desenfoque. Le tomó unos segundos a su visión finalmente enfocarse y aclararse, percatándose a duras penas que estaba acostado en una cama, siendo rodeado por dos personas a las que rápidamente pudo identificar como sus hermanos marciales.

- ¿Zhangmen-shixiong...? ¿Mu-shidi...? ¿Donde...?

- ¡Shidi! - el rostro de Yue Qingyuan era una mezcla de preocupación y alivio. Feliz de al fin verlo despierto. - Estás en la casa de bambú.

- Shen-shixiong, ¿Cómo te sientes? ¿Hay alguna molestia? - preguntó Mu Qingfang revisando sus meridianos. Su voz profesional estaba cargada con tintes de angustia. - Mmm... Todo parece estar en orden ahora.

Shen Yuan seguía intentando procesar lo que estaba ocurriendo.

Al mirar hacia arriba notó un dosel de gasa blanco, con bolsas de perfume finamente elaboradas colgando de las cuatro esquinas, a su izquierda junto a la almohada yacía un abanico de papel y al mirar hacia abajo notó que vestía una túnica blanca, antigua en su estilo, con unas cuantas gotas de sangre fresca.

Sintió un sabor metálico en su lengua. Al limpiar la comisura de sus labios sus dedos quedaron manchados de sangre.

La realización de su condición llegó a él.

¡Quiero A Mi Esposo De Vuelta! (BingQiu)Where stories live. Discover now