Prólogo

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"¿Supiste lo que sucedió?" Los murmullos por las calles no cesaban, había nacido una niña hace poco, una hermosa bebe con un color de cabello peculiar.

"Pobre niña" Los padres de la niña habían sido víctimas de un atentado, un atentado provocado por una tierra lejana, en otro lugar, en donde la "voluntad del fuego" habita.

"Quién se encargará de cuidarla ahora?"

Nagato estaba tenso, Konoha estaba haciendo un altercado cerca de su aldea provocando daños en la misma aunque no fuese ese su objetivo. Escuchó de un tal relámpago amarillo, el nuevo Hokage de konoha, muy poco le había importado, hasta ahora.

En una misión de algunos ANBU por capturar a unos traidores de su aldea, dañaron Amegakure. Llevaba tiempo sin que sucediera esto, tenían una paz relativa y no estaba en sus planes ningún altercado directo o indirectamente. Konan, quien había estado a su lado notó como el pelirrojo suspiró en su lugar, puesto a no poder moverse mucho por el hecho de anteriormente haber controlado a los caminos de pain.

"Nagato, ¿Vamos a actuar?" preguntó Konan preocupada, si bien, su pensamiento de paz se basaba a través de la lealtad y el amor, seguía las ordenes de pain al pie de la letra, aunque eso significará matar.

"No..." Susurró, no estaban preparados para una guerra, no habían vuelto a armar a Akatsuki, no tenían nada. Hacer un conflicto con Konoha ahora mismo sería una pérdida de tiempo y seguramente perderían.

"¿Entonces?"

"... trae a la niña" era lo menos que podía hacer, ¿No? A pesar de sus pensamientos de como lograr la paz a través del conflicto, no quería dejar que niños sufrieran las consecuencias del dolor y la guerra, solo por ahora, al final, son niños ¿No? "Trae a la mocosa ante mi presencia"

Arashi no SakuraWhere stories live. Discover now