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Una noche de octubre Arashi no Sakura fue llamada junto a Sasori. Una noche de octubre, Sakura, sin saberlo, vería por última vez a aquellos que llamó familia. Y una noche de octubre, conocerá a quienes llenarían ese vacío inútilmente.

"La misión es sencilla, lo escoltan y lo curan. Lo necesito vivo y en buen estado. Les queda totalmente prohibido luchar a no ser necesario, pero como último recuerso. Recuerden, es una misión de reclutar no de luchar." Terminó de explicar, Pain.

"Hai."dijeron al unísolo, Sakura y Sasori.

"Si tienen problemas llámenos."

"Listos para partir." Dijo animada, Sakura.

"Vayan."

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"¿Lista para tu primera misión, mocosa?". Preguntó Sasori.

"¡Hai!"

Ambos iban corriendo rápidamente en dirección a Konoha. Días atrás habían viajado junto a Konan y Nagato hasta estar a pocos kilómetros de la aldea. Eran conscientes del sigilo que debían poseer, no deseaban encuentros desagradables.

Bajo la luz de la luna llena, y a lo lejos se apreciaba una silueta, el hijo mayor del Clan Uchiha, el primo del cuervo, y el nuevo integrante de Akatsuki.

"¡Lo veo!" Gritó Sakura, emocionada.

"¿Viene solo?"

"Si... rayos, no."

Detrás del Uchiha, le seguían cinco Jounins en busca de cazarlo.

Sasori chasqueo la lengua, molesto. Esto adelantaría los planes, sin tiempo para explicarle nada a Sakura. Preparó sus marionetas, listo para atacar.

"Sakura, no ataques, llevate al Uchiha al punto de encuentro y regresa cuando de la señal."

"¡Hai!"

Justo cuando el agotado Uchiha cruzo espacio cerca de Sasori, este desenfundo las marionetas, manejandolas con tal proeza que solo el gran marionetista que era podía. Las cuerdas se estimaban y escogían con cada ataque a la distancia, buscando no dejar testigos de su forma. Disparando las espadas y cuchillas guardándose el veneno para evitar sospechas.

Sakura, corrió lado a lado de Itachi Uchiha, quien solo la seguía hasta el lugar predestinado. Para su tamaño, era rápida, pensó el mayor, sin creer por un momento que esa joven era una niña de apenas 7 años.

Al llegar al la cueva, Itachi se recostó en la pared, mientras Sakura sacaba ungüentos para las heridas. A pesar de conocer de ninjutsu médico, no lo ha conseguido manejar bien, más que para curar por 5 segundo heridas pequeñas, así que tuvo que aprender a coser y limpiar heridas para casos como estos.

"Dolerá un poco." Advirtió la pequeña al sacar alcohol de un tarro y ponerlo sobre la herida más grande que tenía en el costado.

"¿Cuantos años tienes, niña? ¿Doce?eres muy bajita para tu edad". Preguntó entre quejas.

"Siete."

Itachi al oírla se calló al instante. Y entre esa piel pálida y ojos inocentes, sólo pudo pensar en su hermano pequeño, en su miedo, y pánico. Cerró los ojos con impotencia, el trabajo estaba hecho, por mucho que le doliera, no se arrepentía de hacerlo, todo por su razón.

"¿Cómo te llamas?"

"... no puedo decirlo si no eres un Akatsuki."

"Lo soy, o bueno, dentro de unos días lo seré."

"Sakura..."

"Bonito nombre, ¿se debe a algo en específico?". Preguntó, algo obvio para quien viera el cabello de la chica, pero bajo esa capucha que la niña llevaba, no se apreciaba más que un solo mechón.

Arashi no SakuraWhere stories live. Discover now