-Podes explicarme? -pregunto Julian serio. Mire sus ojos y unas ojeras bastante oscuras se notaban. Me dolió verlo así.
-Ehh.-titubee.-No sé qué decirte.-bajé mi mirada a mis pies. Traté de controlar mis lágrimas al recordar todo lo malo que le hice a la persona que más amo.
-No podes dejarme así, Pía.-oí como súplica.-Necesito saber por qué me hiciste esto. Quiero que me expliques todo.-soltó.
-Juli...perdoname.
-No. No te quiero perdonar, Pía.-escuché como escupió con odio-Me rompiste en mil pedazos, y me venís a pedir que te perdone?
-Yo...
-Vos qué?-subió su tono de voz haciéndome exaltar. Tomo mi antebrazo con fuerza.-Hablame. Por favor te estoy pidiendo.
-No puedo.-solté de una vez. Mis lágrimas no tardaron en salir disparadas por mis ojos.
-Como que no podés?-gritó enojado.- Pía, decime algo o te juro que no me ves nunca más en tu vida.-mire sus ojos y note cuan rojos y llenos de lagrimas estaban.
-Juli yo te juro que no quise esto.-toqué su mejilla derecha con mí mano. Él se separó de mi agarre.
-Yo tampoco, Pi. -soltó mi antebrazo con intenciones de irse.-Yo quería una vida con vos. Yo te amo con todas mis fuerzas.-bajé mi mirada.
-Yo también.-dije mas para mí que para él. Sentí que se acercó más a mí.
-Queres que vamos a un lugar mas tranquilo para hablar?-preguntó mas tranquilo. Lo miré extrañada. No creo que nada bueno salga de esto.- Por favor.
-Bueno.-acepté suspirando.
Luego de avisarle por medio de un mensaje a mi hermana que me iba con Julián, lo seguí hasta su auto. Me subí en el asiento del copiloto y noté cómo él tomó el volante tensamente.
-Vamos a mi departamento.-avisó a lo que yo asentí.
Luego de unos incómodos 20 minutos de viaje en silencio, llegamos hasta su edificio. Subimos al ascensor en completo silencio y al llegar a su piso, nos adentramos a su departamento. Miré cómo todo estaba igual. Los muebles, las cosas y adornos seguían donde siempre. Hasta la foto de nosotros en México seguía en el mueble del televisor. Sonreí un poco al verla.
-Queres tomar algo?-preguntó arreglándose el pelo. Típico de cuando esta nervioso.-Agua?- Asentí en silencio mirando como se dirigía a la cocina.
-Gracias. -dije una vez me entregó el vaso con agua fría. Él no dijo nada y se sentó enfrente mío.
-Enserio necesito saber. Que pasó? Qué hice mal?-preguntó jugando con sus dedos y sus ojos suplicantes.
-Juli, vos no hiciste nada mal.-dije con un nudo en la garganta. Suspiré pesadamente recordando todo y comencé a hablar.
Le conté absolutamente todo lo que pasó con lujo de detalles. No voy a negar que lloré y estuve a punto de tener un ataque de pánico ahí. Pero Julian tenía razón, merecía saber todo.
-Es un hijo de puta. Lo voy a matar.-dijo secándose algunas lágrimas que cayeron de sus ojos al escuchar mi relato.
-Perdoname. Yo no estaba bien y no sabía cómo decirte. No justifica lo que hice, pero quiero que sepas que vos no tenes la culpa de nada, Ju.-dije mirándolo a los ojos.
-Él sw aprovechó de vos.-asentí y cerre mis ojos tratando de no llorar otra vez.-Si lo veo, lo mato.
-Ponete en la fila.-solté una risa amarga. Él sonrió de lado.-Voy a pedir un Uber.-avisé tomando mi celular.
-Está muy mal si te pido que te quedes?-me miro esperanzado.
-No creo que sea lo mejor, Ju.
-Por favor. No quiero estar sin vos.-suplicó tomándome de las manos.
-Bueno. Está bien.
Julián me prestó una camiseta de la selección con la cuál me acosté en su cama. Él se acostó a mi lado y me miró.
-Te puedo abrazar?-preguntó tímido. Sonreí y asentí. Él se acomodó sobre mi pecho abrazándome y poco a poco sentí como su respiración era tranquila y pausada, indicando que ya estaba dormido. Lo mas raro de todo: No pude pegar un ojo en toda la noche.
¿Está bien lo que estoy haciendo?
°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°°
HOLA HOLA MI GENTE
TANTO TIEMPO POR.DIOSSSS.YA NI ME ACORDABA EL CONTEXTO DE LA FIC AHRE JAJAJA
ESPERO LES GUSTE Y PIDO PERDON POR LA TARDANZA.
<3