the reality between us ; hanknow

diez

"Estás borracho", dice Minho, tratando de no reírse mientras Jisung presiona su rostro contra su cuello, besando su piel allí. "Jisungie, estás borracho, ¿quieres un poco de agua?"

"No ~" se queja Jisung y presiona su rostro más contra el cuello de Minho. "No, quiero quedarme aquí contigo, ángel -"

"Son... horribles", dice Seungmin, sorbiendo algo de color rosa brillante.

"No puedes decir eso cuando tu novio estaba en tu regazo hace un momento", señala Minho. Él sabe que tiene razón, porque Changbin ahora está en el bar por tomar otro trago pero estaba tirado sobre Seungmin hace unos minutos. "No seas hipócrita, Kim".

"Sin comentarios", dice Seungmin en su lugar, y bebe el resto de su bebida de una sola vez, haciendo una mueca cuando el alcohol se quema. "¿Viste dónde están los demás?"

"Chan y Felix desaparecieron para bailar, y Hyunjin y Jeongin están... probablemente asaltando la cocina", dice Minho, todavía lidiando con un puñado de vampiros borrachos que no son novios. "Y mira, Changbin ya está aquí. Ahora deja de hablarme, me estás arruinando la víspera de año nuevo".

"Oye", dice Changbin, trayendo dos bebidas con él. "Aquí tienes, Minnie, te compré otro". Solo obtiene una mirada con los ojos muy abiertos de Seungmin antes de que lo bese, y Minho gime mientras mira hacia otro lado.

"¿Estás seguro de que tu novio no es una zorra?" Minho le exige a Changbin una vez que está completamente seguro de que ya no se están besando. "¿Hay hombres zorras? ¿Es eso una cosa?"

"Lo has visto cuando se ha transformado antes", dice Changbin distraídamente, acariciando el cabello de Seungmin. "Podemos estar seguros de que Minnie no es una mujer zorra."

Ambas parejas se disuelven en su propia conversación después de eso, y Minho se vuelve hacia Jisung, que ahora está raspando los dientes suavemente sobre su cuello, y Minho trata de no pensar en cómo se sentiría tener los dientes de Jisung hundidos.

"Jisungie", llama Minho, lo sacude un poco. "Jisungie, ¿quieres ir al parque? La cuenta regresiva comenzará en quince minutos, dijiste que querías ver los fuegos artificiales, ¿verdad?"

"Mm, sí", dice Jisung, pero sigue insistiendo en el cuello de Minho. "Hueles tan bien, ángel, tan bien..."

"Nunca volveré a usar algo como esto si no te comportas", dice Minho suavemente. No quiere decir una sola palabra de eso: había elegido una camisa de seda de corte bajo que se deslizaba por sus hombros y luego la remató con una gargantilla gruesa, y de inmediato deseó haber tomado una foto de la cara de Jisung cuando Jisung lo vio.

"¿Wow?" dice Jisung, y luego sus manos se deslizan por la cintura de Minho hasta debajo de sus muslos, levantándolo hasta que Minho está sentado a horcajadas sobre su regazo. "¿Quieres decir eso otra vez, bebé?"

"Dios, das vergüenza", dice Minho, pero se inclina hacia Jisung de todos modos, acomodando su peso sobre Jisung.

"Y tú eres bonito", responde Jisung, pasando el pulgar por encima de los chupones que se forman en el cuello de Minho. "No puedo creer que seas mío", agrega, y sus ojos se nublan con alcohol, el rojo se oscurece hasta que parece casi negro.

Minho se estremece; ¿Así es como se siente ser querido? "¿Sí? ¿Te gusta lo que llevo puesto?"

"Me gustan todo de ti", dice Jisung, y su mano se mueve hacia la parte posterior del cuello de Minho, donde es familiar. Casi naturalmente, se inclinan y se besan de nuevo. Esta vez, la forma en que Jisung raspó los dientes contra su cuello está fresca en su memoria, y tal vez tenga curiosidad, esté ansioso por saber cómo se siente al presionar más fuerte contra Jisung, separar los labios con tanta facilidad para alimentar sus gemidos en la boca de Jisung hasta que siente un tirón en el pelo, con las pupilas reventadas.