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❝  encuentro desagradable ❞

Llevaba al pequeño gato negro en sus brazos, él le explicó brevemente lo que harían tal como si su hijo pudiera entenerderlo, al llegar nuevamente a la sala de estar vieron a tanizen con un arnés entre su manos.

—¿Donde consiguió eso?— se acercó a él curioso —¿Pará qué es?—

—Se nota que nos has tenido mascotas antes.—

—Auchh—

—Es para pasear al gato, así no se escapa.—

Tanizen se acercó al pequeño animal y comenzó a pasar con cuidado el arnés por su cabeza y su pecho, no quería que lo apretara demasiado pero tampoco que quedará muy flojo para que se pudiera deslizar de el amarre, sería un verdadero problema seguir corriendo a un gato por todo el parque.

—¿Cuándo compró eso?— miraba atentamente las acciones de su amigo no tan amigo, tenía una pequeña sonrisa en su rostro, esos pequeños actos demostraban lo interesado y comprometido que estaba por cuidar al hijo que tenían.

—Hace unos días le pregunte a Mariana y me recomendó comprar uno.— Tanizen también sonrió y habló con orgullo —No quiero que mi hijo sea un flojo que duerme todo el día.—

—Awww.— continuó hablando pero está vez con un tono bromista —¿Sabía que los padres responsables para una gran porcentaje de personas se ven mucho más atractivos?–

Una risa escapó de los labios del contrario, alzó la mirada del pequeño gato y miró directamente a sus ojos marrones. —¿Tu eres parte de ese porcentaje?

—Sí.—

Los dos se miraron directamente por unos largos segundos, esos segundos fueron suficientes para generar una oleada de emociones dentro de noni, su corazón latía fuertemente, nunca habia notado como se reflejaba en los ojos del contrario.

El ambiente fue un poco tenso hasta que el pequeño gato que había entre los dos comenzó a maullar exigiendo que le prestarán atención.

—Deberíamos ir saliendo.— Hablo con una sonrisa mientras dejaba en el suelo al gato.

(...)

Los dos chicos caminaba por el tranquilo y bien cuidado parque que había cerca de su casa, el pequeño gato caminaba con cautela al comienzo pero ahora se encontraba oliendo todo lo que había en su camino, los dos padres no pudieron evitar pensar que su hijo parecía mucho más un perro que un gato.

Los dos conversaban tranquilos, bromas y risas acompañaban su caminata, eso eran los momentos que noni adoraba con toda el alma, no importaba que tan horrible fuera su dia, unas cuantas palabras de tanizen y las nubes grises que siempre estaban presentes serían alejadas lejos y serían remplazadas por sus hermosos rayos de luz; tanizen era el sol de su vida.

Una sonrisa boba adorno su rostro, de tan solo analizar lo que él contrario lo hacía sentir se sentía jodidamente afortunado, toda su vida penso que nadie lo vería como tanizen lo hacía, que nadie lo besaría como tanizen lo hacía, que nadie lo querría como tanizen lo hacía.

Era tan mágico que parecía irreal, era tan especial que no sentía que lo merecía.

De repente sintió como alguien tomaba su mano, volteó a ver a su costado, tanizen le sonrió de regreso un poco nervioso. Sus mejillas tomaron un ligero tono rosa y apretó un poco más fuerte su agarre.

𝘗𝘢𝘥𝘳𝘦𝘴 𝘥𝘦 𝘶𝘯 𝘨𝘢𝘵𝘪𝘵𝘰 ♡ #𝙣𝙤𝙣𝙞𝙯𝙚𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora