𝘗𝘢𝘥𝘳𝘦𝘴 𝘥𝘦 𝘶𝘯 𝘨𝘢𝘵𝘪𝘵𝘰 ♡ #𝙣𝙤𝙣𝙞𝙯𝙚𝙣

❝ Final ❞

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❝  padres de un gatito ❞

Habían pasado unos largos cuatro días, durante todo ese tiempo y contra su propio gusto no pudo dejar su cama del hospital, las enfermeras venían, lo saludaban, le traían comida y le revisaban de vez en cuando; era algo tedioso y monotomo pero no podía quejarse.

En el primer día los policías fueron algo igual, ellos vinieron y le preguntaban un par de cosas, pedían el mismo testimonio una y otra vez, le fue agotador y desagradable volver a recordar todo lo que pasó esa tarde, pero tenía que hacerlo o si no ari se saldría con la suya.

En el segundo día de estar "internado" (aunque el seguía alegando que se sentía completamente bien y podía volver a casa), para su sorpresa lo visitó el hermano mayor de ari, sí, zorman vino a disculparse y dijo que correría con todo los gastos que conllevaba su atención en aquel hospital, el al principio se negó pero después de mucha insistencia por parte del científico no tuvo otra opción que aceptar.

Después de esos primeros encuentros, vinieron sus visitantes favoritos, Juan y Spreen venieron el tercer día, los dos le trajeron globos y flores y se quedaron hablando con el, el "hechicero" no paraba de decir maldiciones a la rubia y decir que se encargaría de que zorman no la defendiera.

Luego estaba ollie que lo vistaba casi todo los días y se quedaba largas horas charlando con él hasta que tanizen llegara, se estaban dando relevos para cuidarlo y así también cuidar al pequeño gato que se quedaba solo en casa, eso era algo muy lindo y considerado de parte de ambos.

Y ahora habían relevado de nuevo, hace unos veinte minutos tanizen había llegado y lo saludo con un beso en la frente, al parecer ese sería su nuevo saludo desde ahora y le encantaba.

Tanizen estaba sentado en uno de los asientos a lado de su cama y le contaba de cosas sin mucha importancia mientras que el aprovechaba su presencia y comía los insípidos —pero mejores gracias a la paga extra de zorman— platillos que el hospital le podía entregar.

—Y así fue como Mapache rompió tres de mis tazas favoritas.—  Tanizen terminó de contar su anecdota, aunque tenía una sonrisa en su rostro se notaba lo enojado que estaba.

No pudo evitar reír por la molestia del contrario —Mapache solo quería atención.—

—Le doy bastante atención.— Se cruzó de brazos ofendido —Aparte, no has visto cómo ollie lo engrie, atención le sobra.—

—Tal vez quiere mi atención, extraña a su otro papá.— Se tocó el pecho fingiendo tristeza y ternura —Debería ya irme de aquí y visitar a nuestro hijo ¿no lo crees?—

—No.— Habló seriamente —Tienes que recuperarte por completo.—

—¡Ya estoy recuperado por completo!— Se quejo —A este paso el hospital va a ser mi nueva casa, espere...

—¿Uhm?—

Tanizen lo miró confundido y con curiosidad por su repentino silencio, él sólo se agarró el pecho pero está vez dolido y listo para armar su típicas escenas de drama.

—¡Me está abandonando en este lugar!— Se tapo el rostro con su manos y fingió lloriqueos —¡Si ya no me ama solo dígalo!—

—Noni eres un dramas.— Rodó los ojos pero luego no contuvo su pequeña carcajada —¿Cómo te dejaría de amar gilipollas?—