Me convertí en el conejito blanco favorito del Mariscal Alfa

Capítulo 24

Qi Yun estaba atónito ante la pregunta de Yan Tingxue "Sí, sí, ¿Para qué lo estás buscando?"

"Algunos asuntos personales".

Qi Yun aun con preocupación en su rostro, buscó el contacto de Shen Chengfeng y le marcó "Tengo un amigo que te está buscando. Tú... Bueno, habla con suavidad"

Le entregó el teléfono a Yan Tingxue nuevamente "Está conectado, habla con él".

Después de decir eso, tomó la iniciativa de salir y también cerró la puerta de la habitación.

La respiración constante y la voz profunda del hombre salieron del altavoz "Soy Shen Chengfeng".

Yan Tingxue se presionó el pecho mientras tomaba una respiración profunda y hablaba con la mayor calma posible "Soy Yan Tingxue, deberías saber quién soy"

"¿Yan Tingxue?" El tono de Shen Chengfeng se elevó ligeramente "Justo eres tú, también tengo algo que decirte"

El corazón de Yan Tingxue comenzó a latir con rapidez "¿Qué pasa?"

"Lo siento, tengo algunos asuntos personales este domingo ¿Podemos posponer la cita a ciegas?" Preguntó cortésmente.

Los fuegos artificiales estallaron ante sus ojos. Yan Tingxue se cubrió la garganta y preguntó con vacilación.

"¿Puede... cancelarlo, por favor?" Aun así, su voz no dejó de temblar.

Shen Chengfeng guardo silencio y Yan Tingxue contuvo la respiración mientras contaba los latidos de su corazón.

No sabía cuánto tiempo había pasado hasta que Shen Chengfeng preguntó "¿No te ofreciste como voluntario para participar en la cita a ciegas?"

"No"

"Está bien" respondió Shen Chengfeng "Por mi estatus, no es adecuado para hablar de este tipo de cosas"

La mente de Yan Tingxue se quedó en blanco y le tomó un tiempo darse cuenta de que había tenido éxito muy fácilmente.

"¿De verdad?"

"Sí" respondió Shen Chengfeng "Respeto tu elección"

Yan Tingxue no sabía si reír o llorar. Su cuerpo comenzó a tambalearse y tuvo que sostenerse de la mesa, sin saber qué mano usar para sostener el teléfono "Gracias".

"¿Por qué me agradeces?" Shen Chengfeng sonrió "Originalmente era lo que querías. Además, yo también..."

"¿Estás enamorado?"

"No exactamente. Es solo que tengo que cuidar a un amigo ahora mismo y no puedo distraerme"

Yan Tingxue le deseo sinceramente "Te deseo felicidad".

"También a ti"

Al colgar el teléfono, todo el cuerpo de Yan Tingxue estaba inmerso en la alegría.

Al ver su expresión, Qi Yun respiró aliviado y bromeó "No te asustó, ¿verdad?"

"No" Yan Tingxue respondió con sinceridad "El mariscal Shen es una muy buena persona"

"Es la primera vez que oigo a alguien decir eso de él" Qi Yun se rió a carcajadas "¿No crees que tiene una voz feroz? Muchos alfas están demasiado asustados como para hablar con él"

Yan Tingxue negó con la cabeza.

"Bueno. ¿Vas a recoger fresas el fin de semana?"

"Iré". Respondió Yan Tingxue.

Yan Tingxue pensó de inmediato en el rey lobo. Quería darle las buenas noticias rápidamente.

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Por la noche, cuando se encontró nuevamente con el rey lobo, esté también estaba muy animado y parecía tener buenas noticias.