Me convertí en el conejito blanco favorito del Mariscal Alfa

Capítulo 74

Yan Tingxue siguió la lista y compró los suministros correspondientes en el juego antes de regresar a la realidad con las cosas.

Grandes bolsas de comida se apilan sobre la mesa y los edredones se extendieron por el suelo sin un lugar donde quedarse.

Yan Tingxue caminó de puntillas, luchando por pasar por encima de los obstáculos. Abrió la puerta y una docena de brillantes ojos verdes lo miraron al unísono.

"¿Ha llegado la comida?"

"¡Huelo la carne en conserva!"

"¡Y pato!"

"¡Quítate del camino, déjame ver!"

Yan Tingxue de repente sintió una carga más pesada sobre los hombros

"Tomen su tiempo, todo está ahí"

Shen Chengfeng regañó a todos antes de ordenarle a algunas personas que salieran y ahuyentó a los demás "En orden, entren uno por uno"

Los alfas se retiraron a regañadientes al final del pasillo, haciendo fila.

Shen Chengfeng ordenó a algunos subordinados seleccionados que distribuyeran suministros.

"¿Tanto?" El subordinado se quedó sin palabras "¿Cómo trajiste todo hasta aquí?"

"Esta carne es demasiado fragante" El otro respiró hondo "Y es mucho mejor que la del restaurante"

"Eh, esta colcha tiene un diseño de perro, es bastante lindo. Me encantan los perros, jeje"

"Creo que eres un perro estúpido ¡Obviamente es un lobo!"

Todavía había un montón de alfas esperando ser alimentados y aunque la persona asignada estaba regañando, los movimientos de sus manos seguían siendo rápidos.

En el espacio abierto fuera de la nave, todos se sentaron para devorar la comida.

"¡Este pollo es tan crujiente! ¡Tráeme otro!"

"Ha pasado mucho tiempo desde la última vez que comí una comida caliente. Pensé que realmente íbamos a vivir una vida de lecciones de supervivencia en la naturaleza"

"Es demasiado impresionante, reunir tantos suministros en tan poco tiempo y de tan buena calidad"

"¡Es increíble que pueda encontrarlos desde otros planetas!"

"Sospecho que conocimos a los dioses".

"¡Inmortales!"

Yan Tingxue estaba un poco avergonzado "No hace falta exagerar, solo tengo suerte. Si quieren algo más díganlo, les ayudare tanto como pueda"

"¡Los inmortales son inmortales! Dice algo tan poderoso como si fuera pan comido"

"Habla con tanta delicadeza ¿De dónde sacó nuestro mariscal de cara negra la suerte de conseguir una esposa tan buena?"

El rostro de Shen Chengfeng estaba nublado "¿Qué dijiste?"

"¡Que son una pareja hecha del cielo!"

Shen Chengfeng asintió con satisfacción y tomó la mano de Yan Tingxue "Esta es su futura cuñada, deben de ser respetuosos la próxima vez"

"¡Sí!" La respuesta fue clara y contundente.

La presión sobre los hombros de Yan Tingxue creció. 

Tuvo la sensación de ser la cuñada de un grupo de hermanos menores. 

Después de la cena, Shen Chengfeng convocó una reunión con sus subordinados y Yan Tingxue se sentó solo en la puerta de la nave espacial, mirando el paisaje circundante.