El Futuro en Retroceso.

Parte 7

Deku: (El pecoso lo miraba sin creer lo que decía, se sentía un poco apenado por aun sentirse una víctima de sus abusos) ¿Por eso te casaste conmi- digo con él... no, conmigo? (No sabía cómo referirse a su él del futuro)

Bakugou: (Suelta aire divertido y se apoya en la mesada con los brazos cruzados) ¿Crees que me casé contigo solo porque te admiraba? Izuku... Me casé contigo porque estuviste siempre ahí para mí, cuando tenía mis momentos de impotencia, en mis caídas o cuando estaba realmente roto. (Sonríe risueño pensando en su esposo y con su mirada baja) Yo... no quería pasar ni un segundo más de mi vida sin ti, sin tus sonrisas o sin tu preciosa presencia... (Vuelve a mirarlo) Y sé que es extraño escucharlo, verlo o incluso imaginarlo, y no te culpo...

Deku: (El menor lo miraba con los labios temblorosos, baja la cabeza y se secaba los ojos y la nariz con el puño) ¿Desde cuándo te volviste tan blando?... (Decía con voz temblorosa, pero no estaba triste, se sentía más a gusto porque ese Bakugou del futuro le subió la autoestima)

Bakugou: (Suspira divertido y baja su cabeza un poco, para luego solo elevar un poco su rojiza mirada) Desde que me casé contigo... o incluso podría decir que fue mucho antes que eso... (Se frota un poco la cara, ya que se siente un poco más aliviado. Y vuelve a cocinar) Hay servilletas ahí arriba, por si querés. (Señaló con la cabeza el rollo de papel que se encontraba a unos pocos pasos de él)

Deku: Nono, estoy bien, solo es la emoción creo. (Ya algo calmado) Es que la verdad puede que no me lo creo, siempre peleamos y terminamos casados. (Apoya la cabeza en la mesada) Siento que estoy en otra dimensión.

Bakugou: Se puede considerar así... pero creo que pelear fue solo una etapa que debíamos superar... (Mete los vegetales a una olla) Pero entiendo tu confusión...

Deku: Je si... (Decía algo angustiado) Puedes decirme Deku. (Soltó así de la nada) Y si quieres puedo decirte Kacchan, es que estaba algo asustado y confundido...

Bakugou: (Lo mira y asiente) Se notaba... ¿aunque seguro que quieres que lo haga? Sé que puede... molestarte.

Deku: No me molesta, sé que sos Kacchan... bueno, ahora lo sé. (Vuelve a mirarlo como cocinaba) No me di cuenta de que podrías ser más cariñoso o amable. OSEA, SI TODOS CAMBIAN, P-PERO COMO TE CONOZCO DESDE MAS CHICOS PE-PENSE QUE TAL VEZ... seguías siendo algo malhumorado, NO QUISE DECIR QUE SOS MALO ¿OKEY? S-SOS genial...

Por los nervios pensaba que sus palabras le molestaban y se trataba de corregir para que el rubio no se enojara. Aún tenía esos miedos de que le gritara o algo así.

Bakugou: Si, bueno. Eso es lo que me generó tu compañía. (Decía para alegrarlo, pero al ver que aún tenía ese horrible miedo lo mira tristemente y asiente) Está bien Deku... entiendo...

Le sonríe incesantemente, y se queda mirando como caminaba, seguía haciéndole preguntas, y a la vez miraba como esas verduras se cortaban de una manera muy fina. Se quedaba sorprendido ya que no sabía que podría cocinar tan bien.

Se sentía cálido nuevamente, el rubio se sentía algo frustrado, pero a veces feliz.

Termina de cocinar y se sientan a la mesa para comer la tortilla, el pecoso comía la comida concentrado en el sabor, el mayor lo veía con cariño y de vez en cuando le limpiaba los cachetes llenos de papa, zanahoria y otras verduras más.

Despues de comer pasaron la tarde hablando y demás, el chico le hablaba de cómo eran las cosas en esos tiempos y el menor trataba de no decir cosas que le incomodaban y muchas veces se corregía para no ofender al rubio. Cae la tarde y el rubio hacia los quehaceres de la casa y de repente el menor se queda dormido en el sillón por toda la adrenalina del día, Saki se acuesta arriba de él, para darle calor.