Por una Sonrisa [Incompleta]

16~ Eret

Dream suspiró, mirando la pantalla oscura de su televisor.

Desde que Fundy se fue, afortunadamente con la fuerza mental suficiente para finalmente echar a sus padres de su casa, la propia casa de Dream se sentía completamente vacía.

Después de todo, sin Fundy allí, Wilbur y Niki ya no tenían motivos para regresar.

¿Y por qué querrían volver?

Dream aborrecía la soledad. Era una pena que, por mucho que lo intente, siempre terminaba donde empezó.

Después de todo, no hay razón para volver.

La soledad lo perseguía; por mucho que intentara librarse de él, seguía rebotando y regresando, un bumerán insistente.

No volverían ahora que eres el único aquí.

Odiaba la soledad tanto como se odiaba a sí mismo.

No tienen que volver si no hay nada que valga la pena aquí.

Suspiró de nuevo. Todo se sentía tan tranquilo; fue abrumador lo poco que estaba pasando. Podía sentir el silencio arrastrándose bajo su piel, el aire volviéndose más y más pesado, su respiración comenzando a atascarse.

Distráete con algo, rápido.

Miró brevemente la pantalla de su teléfono celular. Era demasiado tarde para el desayuno, pero si trabajaba un poco podría tener el almuerzo listo a una hora decente. Sin embargo, ¿valía la pena? No creía que tuviera demasiada hambre.

Así que se quedó allí, estirado en su espacioso sofá y mirando en completo silencio la pantalla en blanco e inmutable de su televisor apagado.

Pero... él debería cocinar algo de todos modos, ¿verdad? Incluso si no lo comía en este momento o hoy en general. ¿Quizás podría cocinar algo para mañana? Quizás. ¿Valió la pena? Él no lo sabía. El hambre lo eludió ahora; solo pensar en la comida lo cansaba en demasía. No era irrazonable suponer que esto sucedería mañana también; después de todo, había sucedido antes.

Tu soledad te envuelve; nadie sabría que no comiste de todos modos.

Comer no parecía una idea muy atractiva, pero sabía que probablemente debería hacerlo.

Sin embargo, no comer parecía más tentador, especialmente considerando el esfuerzo que tendría que hacer para cocinar. Dream suspiró de nuevo, tirando una almohada sobre su cabeza.

"¿Alguien en casa?"

Del susto, Dream saltó y terminó cayendo al suelo en lugar de quedarse en el sofá. Su almohada se vino abajo con él.

Qué demonios...?

"¿Niki?" Dream murmuró, mientras frotaba suavemente las partes de su cuerpo que había golpeado.

Justo cuando Dream comenzaba a levantarse del suelo, Niki entró en la habitación y miró a Dream, sorprendida, mientras observaba la escena. "Dream... ¿qué estabas haciendo en el suelo?"

Dream resopló antes de responder. "Estaba tirado en el sofá, salté y me caí. No esperaba que nadie entrara a mi casa... Niki, ¿Cómo entraste a mi casa?" Dream estaba bastante seguro de que había cerrado la puerta con llave de antemano. Estaba demasiado paranoico para no hacerlo.

Niki se rió suavemente y sus mejillas se sonrojaron ligeramente por la vergüenza. Luego levantó su mano derecha, algo brillante atrapando la luz. Todavía le tomó a Dream unos segundos darse cuenta de que Niki sostenía un juego de llaves. No, no solo uno.

Niki sostenía dos juegos de llaves.

Y antes de que pudiera decir nada, Niki se apresuró a explicar: "Son el juego de llaves que nos diste a Wilbur ya mí para que pudiéramos venir aquí a cuidar de Fundy. Yo... bueno, vine a devolverlo.