Capítulo Trece: Creo que te amo

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—¿Qué te parece esta peluca, Saeran? ¿es de tu agrado? ¡tengo muchas más de otros colores, por si quieres variar! Aunque siento que el blanco te pega, ¡oh! ¡quizás unas mechas rosas terminarían de darle el toque! ¿qué piensas, hermanita? —le preguntó Saeyoung, mientras sujetaba un espejito de mano frente a él.

—Hm, es decir... es bastante linda, ¿pero me podrías explicar por qué estás vestido así? —lo señaló de arriba a abajo—, ¿y por qué pretendes que me ponga ese vestido rosa?

Saeyoung sostenía una percha con una prenda que debía llegar por encima de las rodillas.

—¡Ah! ¡este es tu atuendo de hoy! ¡pensé que haría juego con tu pelo! Tengo buen gusto, ¿cierto? ¡y ahora póntelo! —extendió su mano, acercándole la percha con efusividad.

Saeran se quedó viéndolo, con la ceja levantada, pesando en qué bicho le había picado a su hermano.

—¿De qué va todo esto, Saeyoung?

—Esto... voy a seguir a Nara esta noche.

—Espera, ¡¿qué?! ¿te has vuelto loco? —alzó la voz, mirándolo con la boca abierta.

—No lo sé, tal vez —soltó un suspiro, tocándose el entrecejo—, ¡es que está ocultándome algo! La escuché hablando por teléfono, me pareció entender que quedó esta noche y entonces le pregunté, ¡pero me mintió!

Saeran recordó como, hacía unos días, había visto en el móvil de Nara un mensaje de un tal club 'Enjauladas', y entonces la preocupación empezó a invadirle.

—Ya veo, aún así, no seas idiota, acabáis de empezar, ¿de verdad crees que seguirla es el mejor camino? Si se enterase...

—¡Lo sé! ¡pero me preocupa! ¿qué se supone que debo hacer? ¿y si le pasa algo? —el pelirrojo pasó las manos por su peluca.

—¿Qué iba a pasarle? ¡puede que estés haciendo un castillo de arena de todo esto! ¿qué pasa si solo no te lo quiere contar? ¡igual no tiene la suficiente confianza contigo!

—¿Tú también con eso? —sonó algo ofendido. Esa misma tarde, Song le había dicho algo similar.

—¿Qué quieres decir?

—Nada, olvídalo, ¿por qué no te pones el vestido? No podemos perder más tiempo.

—Te estás portando de forma infantil —Saeran bufó mientras se quitaba la camiseta para colocarse el vestido por la cabeza. En el fondo, estaba preocupado por Nara, por lo que si Saeyoung pensaba que podría correr peligro, no se lo pensaría más. Se quitó el pantalón y terminó de bajarse la falda, la cual iba muy ceñida al cuerpo—, ¿no había uno más suelto?

—¡No te preocupes, te queda di-vi-no! —exclamó, remarcando cada sílaba.

—¡Pero se notan... cosas!

—¡Cierto! ¡ese es el punto! ¿Sabes? Nara tiene unas piernas preciosas, pero debo admitir que tú tienes un buen culo, hermanita —Saeyoung le guiñó el ojo con descaro.

—¡No me llames así! ¡y deja de mirarme! ¡además, me refería a la parte de delante! —añadió, señalando su entrepierna.

—¡Tampoco se ve mal! —contestó, observándolo con la mano en la barbilla—, oh, y en cuanto a los pechos, te puedo dejar algo de relleno.

—¡Cállate! ¡a veces eres un pervertido! —le apuntó con el dedo.

—¡Solo intento ayudar! —Saeyoung fue a buscar los tacones y se los lanzó al aire para que lo agarrase—, date prisa, nos tenemos que ir—, continuó al tiempo que se colocaba el abrigo.

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⏰ Última atualização: Jan 08, 2023 ⏰

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