Jungkook termina con Taehyung porque quiere vivir y tener nuevas experiencias con otras personas. Se siente muy bien, muchas fiestas, mucho sexo y diferentes experiencias, pero... ¿Por qué le molesta cuando Taehyung también adopta ese estilo de vida...
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JungKook no se quedaba para ver alguna escena más por parte de TaeHyung y del mariscal de campo. Simplemente apartaba la mirada y huía.
Obviamente no estaba pensando con claridad, pues conducía a una velocidad excedente a la establecida, pasaba semáforos que marcaban el alto y realmente el hecho de que no hubiera chocado o una patrulla lo hubiera detenido, era un milagro.
Pero sus pensamientos no estaban tranquilos.
Actuaba en automático dejándose guiar por las emociones. El auto lo estacionaba afuera sin siquiera molestarse en guardarlo en la cochera y la puerta principal la cerraba de un solo aventón, sin importarle la hora y que su familia se encontrara dormida.
— ¡Dios santo, me has dado un susto Jeon JungKook! — apareciendo en la oscuridad del recibidor, su madre soltaba con una mano en el pecho.
JungKook se encontraba de cuclillas, su frente recargada en dorso de sus manos entrelazadas. Sólo el grito de su madre lograba hacerlo pensar en algo más que lo último ocurrido esa noche.
— ¿Te ha pasado algo? ¿Por qué cerraste la puerta así? — de inmediato ella lo cuestionaba.
JungKook pensaba la respuesta un par de segundos en los que tomaba la mano que ella le ofrecía para levantarse.
— Perdóname mamá — pasaba las manos por sus pantalones un poco nervioso y sin saber realmente qué hacer o decir. — Yo... no sabía que estuvieras despierta.
— Bueno... contigo y tú hermano afuera hasta tarde, realmente es un poco difícil dormir de corrido — decía ladeando la cabeza de un lado a otro. — Pero es claro que algo te ha pasado, regresas temprano, cielo — lo veía en su rostro. — ¿Quieres hablar al respecto?
JungKook maldecía por un momento el hecho de que su madre lo conociera tan bien.
— Mhm, no. Realmente no ha pasado nada mamá — mentía con una sonrisa falsa. — Tan sólo se me ha pasado un poco la mano al cerrar la puerta y me duele la cabeza, por eso he regresado antes de lo planeado — ella lo miraba con ojos casi entrecerrados. — De verdad, no te preocupes.
— De acuerdo — terminaba por responderle, aunque la inquietud quedaba en su pecho. — ¿Quieres que te dé una pastilla para tu dolor?
— No, no — respondía rápido al recordar su excusa. — Sólo necesito dormir.
— Está bien — ella se acercaba a acariciar su mejilla. — A tu hermano lo traerá HoSeok más tarde, así que ya sube a dormir.
JungKook asentía de pronto avergonzado, pues aunque su madre no era consciente de ello, él se había olvidado por completo de YoonGi, y siquiera preocuparse por su regreso a casa esa noche.
