57

2.7K 183 21
                                    

28 de febrero de 2022

Terminadas ambas semanas de fashion week, estuve tres días en Francia ya que mis papás viajaron a visitarnos y después regresamos juntos a Santa Fe, yo solo espero no viajar más a ningún lugar hasta por lo menos las fechas de marzo de la selección.

En estos días me permití disfrutar de mi misma y de mi familia, me permití dejar de lado el trabajo, la prensa y presión social, tampoco aparecí por ninguna red social en cuatro días.

Para contrarrestar todo al día siguiente del desfile de versace me enferme y recién se me está pasando, así que mis días consistieron en dormir, dejarme mimar por mamá y papá, comer y disfrutar de estos días libres.

Mi cumpleaños es pasado mañana y es la primera vez que creo que no voy a hacer nada, además hable con mis amigos y todos van a estar jugando en sus ligas, así que no espero mucho para ese día. Probablemente cene con mi familia, si es que Lionel puede venir, cosa que veo muy difícil porque tendría que ser un viaje relámpago.

Estamos tomando mates con mamá en nuestro living, mientras vemos una novela en la TV, aunque más conversamos en vez de mirar, mi papá salió a hacer unos trámites, así que estamos las dos solas.

–La doctora me va a matar cuando se entere que recién me estoy recuperando del estómago y ya estoy tomando mates– mira a mamá que me pasa el mate–. Y comiendo medialunas.

–No creo que te caiga mal, pero vas a tener que comer livianito estos días así te recuperas– le doy un sorbo.

–¿Sabés que estaba pensando?– me mira–. Creo que voy a empezar a ir al nutricionista, últimamente mi alimentación se convirtió en un desastre, además me quiero hacer los exámenes anuales, no quiero dejar pasar el tiempo.

–Me parece bien hija, te tenés que cuidar y que mejor que hacerlo de la mano de un profesional, ¿pudiste hablar con tu psicóloga?– asiento.

–Me dijo que veamos como van las cosas y de como me voy sintiendo, sino vamos a tener que volver con los ansiolíticos– observo su preocupación–. Estoy bien ma, por el momento todo viene bien, si estuve un poco decaída fue por las dos semanas que pasaron, pero estar acá con ustedes me volvió a animar.

–Sabes que me preocupa tu salud, cuídate por favor y si te pasa algo, avisanos, que siempre vamos a estar– sonrió melancólica.

–Te amo, si me pasa algo siempre van a ser los primeros en enterarse–le digo–. Bueno cambiando de tema, ¿para mi cumpleaños cenamos, almorzamos o merendamos?

–Lo que vos prefieras– toma mate–. Es tu cumpleaños, vos elegís.

–¿Los tres juntos? podemos armar algo acá en casa y a la noche salir a cenar– sugiero y ella acepta.

–En que momento creciste tanto y ahora ya estás por cumplir 27– suspira–. Vos y Lionel deberían dejar se crecer.

–Pero si Lionel nunca creció– me río–. De estatura digo.

–Ay hija si te escucha decir eso seguro se enoja– se ríe–. ¿Te dijo que capaz no venga para tu día?

–Sí, no es el primer cumpleaños que pasó sin él, ya me voy a acostumbrar– hago una mueca–. Anto capaz que venga con los nenes, espero.

–La verdad no sé, depende la agenda de Lio, ojalá puedan– asiento dándole la razón–. ¿Sabes que estaba viendo anoche?

–No, ¿qué?– la miro.

–Que Paulo terminó con Oriana– me mira sonriente.

–No va a pasar lo que estás pensando– niego con la cabeza.

–¿Por qué no?–pregunta mirandome

–Porque no sé si quiero volver a sufrir– respondo–. Porque tengo miedo.

–Sentir miedo es algo natural del ser humano mi vida, pero no por eso vas a dejar de amar, de querer– me pasa el mate.

–¿Y si vuelve a pasar lo mismo? deposité toda mi confianza en él y me decepcionó, no quiero que vuelva a pasar lo mismo, aparte no sé si él todavía me sigue queriendo.

–Cada vez que se ven aunque ustedes no se den cuenta, hay algo que los rodea, una tensión rara y siempre terminan en el mismo grupo o muy cerca el uno del otro– dice–. Les quedaron muchas cosas por vivir y experimentar juntos, después de todo Paulo sigue siendo un buen chico.

–Sí, tan bueno que me terminó haciendo mierda– digo rodando los ojos.

–Que sea bueno no quita que sea boludo– ríe–. Igual es tu vida y lo que vos quieras o hagas siempre va a tener el apoyo de nosotros– le paso el mate.

–¿Si asesino a alguien también?– me mira mal y yo sonrío.

–Todo menos eso– nos reímos–. Igual pensá lo que te digo.

Hablamos un rato más y después ponemos una película para ver que elejimos entre las dos. En mi mente sigue resonando lo que hablamos.

¿Realmente en algún momento voy a estar lo suficientemente segura como para que llegue a haber algo entre nosotros de nuevo o ya quedó todo en el pasado? ¿Lo que alguna vez tuvo un final puede volver a empezar?, esa es la verdadera pregunta en todo este lío.






Forever | Paulo DybalaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora