No me digas que me quieres [2]

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Culpa Mía

Sorprendentemente el fin de semana logro quedarme en casa, pasando por completo desapercibida ya que no hay mensajes insistentes de Kelsey ni de las chicas para que salga lo cual me resulta un poco extraño, ya que llevan tiempo intentando que salga de casa, pero no es algo de lo cual me quejaría. Gracias a eso logre adelantar artículos que debía enviar esta semana para la edición del próximo mes de la revista y ya solo me quedaba esperar los comentarios y si tenía que corregir algo o cambiarlo.

Hablé con mamá y papá como siempre sin falta el domingo en donde nos ponemos al día y supongo que después de lo qué pasó ambos intentan estar más al pendiente de mi sin estar totalmente encima de mi. Con mamá es sobre cosas más complejas, como por ejemplo sobre la terapia y checando como estoy emocionalmente, aunque no lo pregunté directamente sé cuál es la intención de sus palabras cuando conversamos. A diferencia de papá, que con él puedo hablar de cosas sobre temas en específico y solo me pregunta como me encuentro esperando que le diga la verdad.

No fue mucho lo que hice el fin de semana, pero recuperé mis horas de sueño, las ojeras ya eran parte de mi rostro, aunque se venían menos y eso me hacía verme un poco menos acabada. Sabía que mi aspecto últimamente no era el mejor, pero intentaba ponerme mascarillas, cremas, dormir un poco más, comer a mis horas y de vez en cuando cortarme el cabello manteniéndolo de un largo aceptable.

Pero hoy no creo poder dormir.

Ares sin un mensaje previo o al menos una advertencia diciéndome que lo que vería no me agradaría en lo más mínimo me hubiese gustado, pero no lo hizo, solo me mando unas fotos de su fin de semana. Que consistió en ir a restaurantes comiendo comida que se ve deliciosa y pasear por la ciudad en diferentes bares, así como monumento y lugares turísticos e importantes, realmente eso no es lo que me molesta, me alegra que al menos uno de los dos pueda hacer su vida con normalidad, eso debería de hacer yo porque nada me lo impide, pero no.

No me había percatado la primera vez, sino la segunda mirada que le di a las fotos examinándolas mejor, tomándome un tiempo para procesarlo y puede que esté exagerando, pero hay una en específico donde se encuentra al grupo de personas que están con el siempre, los mismos tres chicos y una chica que es hermana de uno de ellos. Lo sé porque ya me había hablado de ella y me tensé cuando lo contó, pero sabía como se podía escuchar un Ares interesado y no estaba ahí. El problema es que esta vez hay otra chica, una rubia alta esbelta que sonríe levemente en cada foto y que está junto a Ares en cada una de estas.

Exagerando o no, están en una posición que quiero ver como amigable, pero la analicé más de lo que me gustaría admitir. Ella tiene un rostro angelical, sus facciones son delicadas y dulces, su cabellera rubia perfecta brilla por la luz del sol y solo puedo pensar en que es demasiado bonita y al lado de Ares, ambos parecen sacados de una portada de revista. Se que esos pensamientos no me ayudan en nada porque me intrigaba el cómo es que en cada foto coinciden estar juntos, al igual que me resulta inquietante.