𝖇𝖑𝖆𝖈𝖐𝖑𝖎𝖌𝖍𝖙 𝖌𝖑𝖔𝖜 𝖓𝖎𝖌𝖍𝖙

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Deku regresaba del departamento de apoyo, pues le había pedido a Mey unas mejoras para su traje que le permitieran prolongar un poco más la resistencia del látigo negro y al parecer la chica lo estaba consiguiendo.  Se sentía un poco más tranquilo por ello, pero aún le quedaban algunas otras preocupaciones que lo mantenían algo inquieto.

Por ejemplo, últimamente se reunía con Kachan y All Might para entrenar y perfeccionar sus técnicas referente al One For All, pero parecía que no estaba avanzando mucho y eso lo frustraba, se sentía contra reloj, cómo si debiera estar preparado en determinado tiempo y no entendía el porque de su sentir ni para qué debía estar preparado.

También estaba Todoroki y su comportamiento con Uraraka, al parecer ya lo había superado, pero referente a lo de su versión pequeña, tal vez significaba que aún había algo que no estaban viendo. Lo quería ayudar, pero el era una persona muy cerrada, incluso, lo había visto con Yaoyorozu un par de veces pero nunca le comento nada al respecto.

Y luego, había algo en el fondo de su corazón que lo hacía preocuparse por su amiga Uraraka.  No era precisamente que temiera por ella, pues él sabía que era una chica muy capaz hasta cierto punto. Más bien era cómo un sentimiento de ¿Tristeza? ¿Miedo? Cada vez que la miraba interactuar con kachan se sentía desplazado, había algo sucediendo entre ellos dos que no le gustaba del todo.

Muchas veces se regañó a si mismo por sentirse así pues se trataba de su mejor amigo de la infancia y su actual mejor amiga y se supone que debería sentirse feliz por el hecho de que ellos interactuaran.. Aún así... Quería saber lo que pasaba ahí.

¿Las cosas estaban bien o mal? El día anterior en la sala común de la residencia le sorprendió mucho verlos juntos, y de cierto modo le dolió que Uraraka lo evitará y se fuera con kachan, pero hoy en el entrenamiento el ambiente entre ellos era otro, cómo si ambos se detestaran a morir. Y justo antes de salir al encuentro de Hatzume vio por los jardines cómo Kachan llevaba de la mano a la castaña ¿Ya se estaban llevando bien ahora? Que confuso.

El sol ya se había ido desde hace horas y por los jardines se había un calmo silencio. Se detuvo un poco para aspirar el aroma del césped recién cortado.
Suspiró muy fuerte. Decidió que no le gustaba para nada ese sentimiento, debía platicar con Uraraka lo antes posible. Se preguntaba si ahora mismo sería muy tarde para ir a verla.

Al entrar al edificio de dormitorios le llamó la atención que la luz de la cocina estuviera encendida, así que con curiosidad se acercó.

Kaminari y Sero estaban alrededor de un bowl en la barra de la cocina mientras que Kirishima cocinaba algo en la estufa.

— ¡Hola chicos! ¿Que hacen?

Inmediatamente Kaminari guardó unas cosas bajo la mesa.

— ¡Waaaa! Midoriya ¡no asustes así a la gente!

— Ahh... ¿Lo siento?

Le pareció raro que esos tres estuvieran en la cocina tan tarde pues ya había pasado la hora de la cena.

— ¿Están horneando Brownies? — Preguntó olfateando el aire. — Huele delicioso.

— Si. — Sero batía velozmente en el bowl. — esque nos quedamos con hambre jaja.

— Ya veo... ¡Oh! ¿Les ayudo?

Los tres levantaron las manos al aire.

— ¡NO!

Deku parpadeó confundido.

— Es decir. — Sero se excusó. — No es necesario, ya casi terminamos.

— Insisto, de niño ayudaba a mi madre y ... — Oh no, sentía ganas de llorar al recordar esos hermosos momentos con su mamá. — Eso me trae gratos recuerdos.