Capítulo V

2 0 0
                                    

🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀🥀

El extraño suspiró y se quitó la capucha aunque seguía de espaldas a mí. En ningún momento se dio la vuelta lo cual supuse que no quería que supiese quien era y lo respetaba. Al verle sin la capucha comprobé que efectivamente era un demonio, y que era un hombre.

-No debes de andar sola, ¿Acaso no te diste cuenta del peligro que corrías? Pregunto algo mas tranquilo
-¿Cual peligro?- Pregunté confundida.
Él suspiró y se mantuvo un momento callado.
-Que humana mas tonta eres- Dijo frío
Eso me ofendió, puede que no entendiese a que se refería, pero tampoco era para eso. Me di la vuelta y me dispuse a salir a la multitud, cuando él me volvió a parar.

-No salgas sola, menos si hay demonios cerca ¿Entendido?- Me preguntó con voz seria.
-Vale...- Dije dudosa.

Me di la vuelta para mirarle pero él ya estaba de espaldas, supongo que nunca sabría quién era el que me ayudaba.

-Y, ¿Entonces cómo salgo?¿Me teletransporto? Pregunté con el tono más serio que pude.
-Que humana más pesada...-Me respondió con voz cansada.
-Pues entonces deja de impedirme que salga y decirme peligros tontos e inexistentes- Dije alzando un poco el tono.
-Hmm...okay, sal, ya veremos quien viene llorando más tarde- Tras decirlo se alejó un poco de mí.

Gesto que yo entendí como un permiso para que me fuera, me dí la vuelta y volví a la acumulación de gente teniendo las palabras en mente. Otra vez en el agobiante enorme me intenté mover, di varios pasos hasta que empecé a notar algunas manos pasando pasajeras en mi cuerpo, sabía a la perfección que zonas estaban tocando, pero intente cubrirme y pensar q solo era por la falta de espacio, al haber tantas personas no sabía de quién o quienes eran pero me incomodaba mucho. Me fuí para un lado de la gente hasta que ví una especie de calle sin salida, no me serviría para mucho pero había menos gente, así que empece a acercarme lentamente, estaba en el proceso hasta que sentí unos grandes brazos rodearme y llevarme a algún sitio, pataleé, forcejeé y hasta mordí un brazo de aquel tipo extraño que ni se inmutaba por mis intentos de escape.

En un momento ya no había gente, estaba entrando en una especie de casa abandonada, al principio no había nadie hasta que pude ver que cuando me llevó a lo que pensé que sería el salón de aquella casa vi a por lo menos cinco demonios esparcidos en el lugar, bueno, espero que aunque sea mi hermano asistiese a mi funeral.

Los demonios al notar mi presencia y la del desconocido que me cargaba se sobresaltaron y sonrieron con malicia. Empezaron a felicitarle diciéndole cosas como -¡Guau, una humana!- o -Ostia, esta está buena-, había muchas formas de interpretarlo, pero ninguna buena.

Nada más aflojó un mínimo su agarre intente correr desesperadamente la salida, pero de nuevo unos brazos me detuvieron.

Pataleé de nuevo e intenté gritar para llamar la atención de alguien, pero me taparon la boca con una mano, está completamente inmovil. Todos empezaron a rodearme, empecé a llorar por el miedo a lo que pudiese pasar, me encogí en el suelo, haciendo una bolita intentando aislarme, y lo sorprendente fue que nadie me paró.

Me quedé en la misma posición, estaba demasiado asustada, empecé a escuchar gritos de terror de los demonios y muchas pisadas por la casa, intuí que intentaban escapar, ¿Pero de quien?

Levanté un mínimo la vista y volví a ver esa espalda tan peculiar, rápidamente se puso detrás mía y me levantó, luego me tapó los ojos con una mano y empezó a tocar mi cuerpo con lo que me volví a asustar.

-Tranquila, solo compruebo que no te hayan hecho nada- Dijo con lo que pienso que fue un intento de sonar amable.
-No hicieron nada, no les dió tiempo- Dije casi en susurro.

Mi debilidad 🥀Where stories live. Discover now