Llegó la noche y Guillermo despertó después de varias horas de haber dado a luz, las luces estaban encendidas y la habitación llena de flores. Habían muchos regalos lindos en las mesitas y varias cartas de sus amigos.
Se sentía dichoso por tener personas cerca que lo querían mucho y lo protegían. Era algo que agradecía verdaderamente.
[...]
Un par de agentes estaban en la oficina de policía.
-detective Gaitán, los argentinos siguen interviniendo el caso de Sergio Agüero, la fiscalía les dió jurisdicción en la zona- comentó uno de ellos.
El hombre sentado golpeó con la parte baja de la mano la mesa, estaba molesto y quería acabar con el asunto de una vez por todas pero las pruebas eran insuficientes, tenían muchas personas por interrogar.
-quienes están en la lista? Debemos apresurarnos antes de que esos imbéciles quieran ganarnos el caso- Gaitán tomó una hoja.
Había varios testigos pero los principales implicados eran prioridad. Así que no se cansaría de buscar.
El hombre tomó el teléfono y marcó un número -Lopez, dime que encontraron, PERO YA, QUE NO TENGO TU TIEMPO!!!- escuchó la respuesta por varios segundos y se levantó para salir a una de las patrullas.
-voy a refundir a quien salga culpable- el era conocido por ser un agente el cual nunca mostraba piedad ante quienes consideraba delincuentes.
Llegó a la división forense en la cual algunos peritos trabajaban en la obtención de pruebas de cada crimen. Entró inmediatamente.
-que me tienes?-
-señor, hay algunas cámaras que muestran de lejos a alguien salir del lugar inmediatamente después del asesinato- el perito puso la grabación en uno de los monitores, una persona salía corriendo de la casa en la que se cometió el crimen.
El hombre miró a detalle y haciendo zoom logró captar el rostro de la persona. Se levantó esbozando una sonrisa de victoria.
-emitan una orden de aprehensión contra Francisco Guillermo Ochoa Magaña, por homicidio doloso contra Sergio Leonel Agüero- imprimió una ficha de búsqueda, la fotografía de Ochoa y la orden para presentarla ante un juez.
[...]
Leo entró a la habitación de su amado.
-mi amor despertaste, como te sientes?- se acercó para besar su frente.
-bien amor, ya mucho mejor y listo para ir a casa con nuestro frijolito- aún estaba un poco cansado pero estaba dispuesto a disfrutar el tiempo ahora con su familia completa.
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Comentario del autor: si a alguien en su patio le caen unos calzones del america medio agujerados eran míos, el viento se los llevó.
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Amor en fase de grupos
RomanceGuillermo Ochoa queda perplejo ante aquel tiro de Lionel Messi y un gol de amor entra en su corazón