Madelaine Smith, una chica con una vida normal, una adolescente como cualquier otra. Vive en un pueblo pequeño de Indiana, Hawkins, con su abuela, un pueblo en el que supuestamente "no pasa nada".
Créditos: @laudiaries
La historia no es mía, solo ca...
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Narra Steve
Me desperté algo cansado, aunque había dormido bastante bien. Al abrir los ojos, vi un pelo castaño frente a mí, a lo cual no pude evitar sonreír. La rodeaba con el brazo, supongo que por la noche, inconscientemente, la había abrazado.
Con cuidado, tratando de no despertar a Madelaine, aparté la mano y me levanté de la cama. Ella se movió, dándose la vuelta, pero parecía que seguía durmiendo, lo cual agradecí. Verla dormir era una de las cosas que más paz me daban, se veía tan tranquila.
Sonreí y agarré la ropa que tenía tirada por el suelo, me vestí, tratando de no despertarla. Doble lo que me había dejado y se lo dejé en el escritorio.
Madelaine
Una ráfaga de aire me despertó. Al abrir los ojos vi que Steve ya no estaba a mi lado, me quejé internamente. Busqué por la habitación, pero no estaba. Al ver la ventana abierta, supuse que ya se había ido. Bufé, cansada y me levanté de la cama.
En mi escritorio me encontré la ropa doblada de mi padre y una nota: "Gracias por dejarme dormir con vos, y sobretodo gracias por escucharme, lo necesitaba. Nos vemos en un rato - Steve"
Sonreí inconscientemente y agarré la ropa que había, dejándola en mi placar. Después me vestí y bajé a desayunar con mi abuela.
— ¿Qué tal anoche? — preguntó, mientras me ponía un plato de tortitas delante.
— Oh — sonreí, recordando todo lo que había pasado en la fiesta. Recordé a Billy — Bien — dije.
— ¿Solo bien? — me miró, sentándose en frente mio con su desayuno.
— Bueno, lo típico de las fiestas, ¿no? Bailamos, reímos... — expliqué, tratando de obviar detalles — Ya sabés —
De pronto sonó el timbre. Me levanté y abrí la puerta, dando paso a Nancy, a la cual no esperaba. La dejé pasar y subimos a mi habitación.
— Necesito un consejo — dijo, sentándose en mi cama y mirándome — Y muy urgente —
— Déjame adivinar — me senté con ella y sonreí — Steve... Jonathan... — reí y ella suspiró, agotada.
— Creo que ayer la cagué con Steve — aclaró y yo asentí — Bebí de más y... no se. No me acuerdo mucho, solo se que se enfadó y mucho —
— Ok... — dudé en decirle que ya lo sabía — Creo que tenés que hablar con él, aclarándole todo — expliqué y me miró — Si lo querés, si realmente lo querés, habla con él y arregla las cosas — comenté y me miró — Pero si no, no alargues más esto y terminá con él —
