I told you

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Beomgyu tenía que escapar del departamento de Yeonjun a como diera lugar. A penas llegaron a la cocina le dijo que tenía que llamar a Soobin, para ver qué había pasado con la llave. Esperaba que ya pudiera volver a casa.

Deseaba con todas sus fuerzas refugiarse en su cama y llorar hasta que todo el dolor que sentía se evaporará por arte de magia.
En cuanto su amigo respondió el teléfono, sintió que el nudo en la garganta volvía a formarse.

- Buenos días - hablo un alegre Soobin - ¿Cómo te fue durmiendo entre los brazos de tu príncipe encantador?

- ¿Ya estás en casa? - pregunto despacio.

- Aún no, pero Taehyun paso por mi a casa de Nayeon, estamos...como a una calle. ¿Ya tan pronto quieres volver?, ¿No prefieres quedarte más tiempo con Yeonjun?

- No...ya tengo que irme.

- ¿Por qué? - el tono de Soobin cambió.

- Yo... - tomo aire - No puedo decirlo por teléfono. Te veo en el departamento.

- Pero Gyu...

Está vez fue su turno de colgar. Estaba mal preocupar a Soobin, pero no podía hablar de lo que había pasado sin que comenzará a llorar, necesitaba contarle todo en persona.

Al volver a la cocina, Yeonjun estaba buscando todo para preparar los waffles.

- Creo que no tenemos fruta - hizo una mueca - Está bien si les pongo miel a tus...

- Te-tengo que irme - lo interrumpió - Soobin...ya está en el departamento y quiere que...yo...regrese.

- Oh. Entonces deja que te acompañe, iré por un abrigo y...

- No te preocupes...yo...yo puedo irme...solo. Gracias, de todos modos.

Al salir de la cocina un adormilado Kai venía bajando las escaleras.

- ¿Beomgyu? - bostezó - ¿Qué haces aquí?

- En realidad...ya me iba - comenzó a caminar hasta la puerta, Yeonjun iba detrás de él.

- ¿Ya te vas? - bostezó de nuevo - Pero...¿A qué hora llegaste?

Beomgyu ignoro sus preguntas, luego podría contestarlas, o lo más probable; Yeonjun lo haría en cuanto se fuera.
Tomo su abrigo y su bolso, que había dejado en la entrada, el día anterior.

- Beom, ¿Seguro que está todo bien?

Claro que no, tengo el corazón roto y quiero llorar hasta que se me termine el oxígeno.
Pensó dramáticamente.

- Si, está todo bien - respondió sin mirarlo.

- Puedes quedarte y más tarde...

- De verdad no puedo - termino de tomar sus cosas y lo encaró - Gracias por...todo. Lo que hiciste...fue muy amable de tu parte.

Yeonjun negó - No tienes nada que agradecer. Yo...quise hacerlo.

Beomgyu sonrió a medias - Bien, entonces...supongo que, nos vemos luego.

La mirada de Yeonjun era confusa, Beomgyu en cambio trataba de mantenerse relajado. Ambos querían decir cosas diferentes...

Cuando el contacto visual comenzó a doler, Beomgyu aparto la vista y abrió la puerta.

- Gracias otra vez.

Estaba a punto de girarse y huir, pero Yeonjun le tomó la mano otra vez. Haciendo que sus ojos regresarán la vista a los suyos.

- Beom...yo... - un nudo también estaba en su garganta.

Beomgyu negó, no quería escuchar nada más, porque sentía las lágrimas acumularse en sus ojos. Soltó su mano y camino hasta las escaleras. Tenía que salir de ese edificio. Ahora.

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