Anastasia

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—¡Oooh!

El gemido doloroso de Scarlett sacudió toda la calle. Incluso las personas que pasaban se sobresaltaron por el extraño sonido y detuvieron sus pasos.

—¿Qué está pasando?

—Bueno, ella trató de robar el anillo de la doncella que servía a su noble. El dueño la está castigando.

—Oh, Dios mío, qué gran descuido.

Asombrado por la audacia de Scarlett, nadie simpatizaba con ella.

Finalmente, Scarlett fue golpeada durante mucho tiempo rodeada de todo tipo de chasquidos de lengua y sonidos de sorpresa, y fue realmente liberada justo antes de morir. Para ser exactos, la golpearon brutalmente y la tiraron en medio de la calle.

'... Tengo que vivir.'

Mientras tanto, su deseo de supervivencia era tan fuerte que Scarlett arrastró su pierna entumecida a una clínica. Efectivamente, todo lo que tenía que hacer era aplicar su ungüento a las heridas abiertas.

—¡Ah, Scarlett!

Cuando regresó a su posada con las vendas envueltas alrededor de su cuerpo, Avelin preguntó, por supuesto, asombrada.

—¿Cómo diablos sucedió esto...?

—No preguntes.

Scarlett asintió bruscamente y fue directamente a su cama. Pero Avelin lloró incansablemente.

—¡Tienes que ir al médico! ¡Estás en problemas!

—Ya he estado allí. Me duele la cabeza, así que cállate.

—¿Quién te hizo esto?

Avelin dijo con voz trémula de ira.

—No lo dejaré pasar. ¡Tengo que decírselo a los guardias...!

—¿Un guardia?

Al escuchar las palabras de Avelin, Scarlett se rió como si fuera ridículo. La miró con ojos como si estuviera viendo a Avelin de forma extraña.

—No hay necesidad de eso, Avelin. ¿Qué guardia se atrevería a castigar a un noble golpeando a un plebeyo que no tiene adónde ir?

Cuando Scarlett omitió el hecho de que terminó así mientras intentaba robarle, la tez de Avelin se puso pálida.

—Scarlett...

—No necesito ningún consuelo o simpatía. Solo déjame descansar tranquilamente.

Avelin finalmente se lamió los labios y se alejó en silencio.

A solas con ella, Scarlett cerró sus feroces ojos y silenció su antigua ira dentro de ella.

'... Necesito fuerza.'

Necesitaba la fuerza para no ser tratada así por nadie.

'Para amenazar al Sumo Sacerdote con convertirse en la hija adoptiva de un noble de alto rango. Entonces nadie puede maltratarme.'

Para hacer eso, primero tuvo que eliminar los obstáculos. Cuando Scarlett curó algunas de sus heridas, compró rodenticida en secreto y lo agregó a la comida de Avelin.

—¡Oh...!

Scarlett pareció un poco sorprendida cuando Avelin vomitó sangre y se retorció el cuerpo con angustia. Avelin se estaba muriendo con más dolor del que esperaba.

—Oh, Dios mío, ¿fue esto demasiado cruel?

Avelin miró a Scarlett con una expresión confusa, y pronto se dio cuenta de toda la historia.