Asistente

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Era lunes por la mañana y yo ya me estaba preparando para ir al trabajo. Muchos podrían odiar ir a trabajar pero a mí me encantaba por qué en la oficina es donde más me divertía. Tengo una asistente que se llama Rox ella es muy especial por qué a parte de desempeñar sus labores como asistente es la encargada de mantenerme satisfecha en mi horario de trabajo y no lo mal entiendan si tengo más personas con las que me puedo enrollar pero ella es magnífica con lo que hace.

Rox es una mujer de 25 años que tiene todo en su lugar un culo firme, una cintura adictiva y sobre todo unas tetas que me encanta mamar a diario mientras estoy sentada y ella sobre mi.

Ya hemos tenido un delicioso orgasmo en cada rincón de mi oficina pero mi lugar favorito es tenerla sobre mi escritorio.Tuve que poner paredes a prueba de sonido para que nadie escuchará cuando gemimos nuestros nombres. Podemos gritar lo que queramos y nadie se entera que nos estamos follando de lo más rico ahí dentro.

Llegué a la oficina y Rox ya me estaba esperando dentro, llevaba una gabardina completamente cerrada en cuanto cerré la puerta ella se la dejo caer al suelo y traía puesto un conjunto negro de encaje. Me acerque a ella y la comencé a besar en el cuello la senté sobre mi escritorio y ella enredo sus piernas en mi cintura. Poco a poco fui quitando ese sostén que muy apenas cubría, ella me dió una lata de crema batida y le puse un poco en sus pechos para succionar los con un sabor todavía más rico del que ya era, a Rox le encanta que mame sus pechos ella empezó a desvestirme me quito la camisa y soltó mi falda solo quedé en ropa interior. La guíe hasta el sofá y ella se sentó a horcajadas sobre mi . Metí dos dedos dentro de su boca para humedecer los después los meti poco a poco dentro de su vagina la prepare un rato con mis dedos hasta que fue suficiente.

Saque un dildo de doble punta y lo introduje duro contra ella yo ya estaba escurriendo así que metí la otra punta en mi y comenzamos a penetrar nos mutuamente.

Se sentía tan rico las dos saltando y sintiendo placer al mismo tiempo.

Estábamos tan concentradas en lo nuestro que no nos dimos cuenta que alguien estaba viéndonos. Lilian era como la mensajera que conectaba los documentos a cada oficina, es una chica con las tetas grandes y un culo envidiable siempre me ha gustado mirarla e imaginaria encima de mi gimiendo de placer y al parecer hoy llegó ese día.

Lilian se acercó a nosotras y me dió un beso grande en los labios para después ir bajando hacia mi cuello dónde dejó una marca, solté un gemido. Rox y yo seguíamos penetrandonos de lo más rico y Lilian se encargaba de estirarnos los pezones y de vez en cuando lamerlos y mamar los.

Rox y yo nos separamos para incluir a Lilian y formar un triángulo chupando nos los coños. Rox me chupaba a mi yo a Lilian y ella a Rox me encantaba su rico sabor, así estuvimos hasta que llegamos al máximo punto de placer.

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