👑CAPÍTULO 56👑

313 36 0
                                    

ALEXANDER

Abrí los ojos al sentir algo helado golpear mi rostro. Comencé a toser, mientras mi vista se aclaraba.

—Jully — murmuré con duda, porque la imagen seguía siendo algo borrosa.

—Hola Ivanov, al parecer jugaste con la chica equivocada —dijo.

—A pesar de mis advertencias —un chico salió de las sombras.

Sin poder evitarlo, una risa escapo de mis labios al ver a su hermano con apariencia a Jack Sparrow. Me encanta el personaje y la película, pero es difícil ver al idiota de Agustín con seriedad teniendo ese estilo.

Un puño viajó a mi rostro, y el dolor invadió mi mandíbula. Maldición, eso había dolido. Mire a mi costado, donde Diaz me dedicaba una sonrisa.

Lamí la sangre de mi labio, sintiendo el corte provocado. Apenas había logrado curarme de la anterior abertura, y ya tenía una nueva.

—¿Te parezco una broma? —preguntó Agustín.

—¿Quieres que sea sincero? —Siento otro golpe en mi cara. Reí débilmente y levanté la mirada, conectándola con él—. Sí, me pareces una mala broma, y más con ese estilo —otro golpe recibe mi cara.

—Díaz —reprime Jully.

—¿Qué?, es difícil no perder los estribos con él —expuso—. Además, siempre lo quise ver de esta manera, atado y a mi merced.

—Uf, fuertes confesiones —dije, para luego dedicarle una mirada—. No soy de chicos, pero por ti puedo hacer una excepción si agregas a tu novia —le guiño un ojo, y su puño viajo a él.

—Díaz —reprime ahora Agustín.

—¿Qué no escuchaste lo que dijo? —preguntó exaltado. Sonreí, esto era divertido.

—Solo te está provocando, no caigas en su juego —sus palabras me recordaron a las de hace unas noches. Parece que Díaz no sigue sus propios consejos, aunque, ¿Quién lo hace realmente?

—Ya, cállense ambos —ordenó Jully, avanzando hacia mí y haciéndole una señal a su hermano para que alejara a Díaz de mí.

—Bien, la cosa estará así Alexander —me rodeo, pasando su mano por mis hombros—. Mañana buscarás a Lys, y enfrente de la escuela terminaras con ella, seguido, iras a buscarme al comedor, te disculparas conmigo frente a todos y pedirás volver a ser tu novia, luego, a la hora de la salida, me llevaras a comprar cosas lindas, sin poder objeción de cuánto dinero gastes, ¿entendiste?

Sin poder evitarlo, reí.

—Tú estás loca —murmuré.

—No lo contradigo, por eso harás lo que yo te he pedido —me hace mirarle— si no quieres que exponga el apellido de Lys. —Mi sonrisa se borra— ¿En serio creíste que eras el único que lo sabía?, ¿O qué Lara lo descubrió por su cuenta? No cariño, yo fui quien se lo digo. Aunque es una lástima que haya terminado muerta, por desear descubrir más de la cuenta sobre esa bastarda, para hacerla caer y obtenerte. —Negó—. Demasiada avaricia de parte de ella, ¿no crees?

—Su nombre es Lys, no bastarda —corrijo, ante su denigrante palabra. Ella ríe.

—¿Por qué?, sí, es una bastarda, la basura para la mafia.

Apreté la mandíbula, intentando controlar la ira.

—Entonces, ¿tenemos un trato? —preguntó la rubia. Ahora fue mi turno de reír.

—Eres una maldita loca, que condenaré al infierno si continúas desafiándome e intentando manipularme.

—Ahora libérame para largarme de aquí —ordene.

Tanto ella como los chicos ríen.

—Tu palabra ya no es mi ley Alexander, así que hazlo tú —avanzó de nuevo a mí, tomándome de la barbilla —. Más te vale hacer lo que te pedí, si no solo Lys saldrá afectada en la escuela. —Me dio la espalda y se dirigió a la salida del almacén en compañía de sus matones de cuarta, dejándome atado.

👑👑👑

LYS

Estiré mi mano para alcanzar una piedra y golpeé su cabeza con fuerza, liberándome. No pensaba morir en manos de ese monstruo, por el orgullo que aún me quedaba.

Me puse de pie sobando mi cuello, mientras él limpiaba la sangre de su cabeza.

—No quieres luchar con armas, bien, hagamos esto a la antigua —dije, sin soltar la piedra, en fin, no era un arma en sí, y al menos debía tener un poco de ventaja hacia él.

Una sonrisa curva sus labios y sin dudarlo viene a mí.

Esquive sus golpes, al ser más baja y delgada. Retrocedí cuando no logre esquivar su pierna, que golpeo mi costilla.

—Uh, parece que desprotegiste tu lado más débil.

Lo miré mal, pero no dije nada.

Cuando tuve oportunidad, logré golpear su barbilla con la piedra en mi mano, logrando que se dislocara.

—Parece que el maestro también comete errores —me burle. Con la rabia, consumiéndolo, acomoda su mandíbula.

Continúo luchando, sintiendo el dolor palpitante en mi costilla, por lo que espere que no haya ninguna rota. Caigo al suelo, cuando su pierna golpeo mi estómago. Tomándome del cabello, me arrastra por el suelo, dirigiéndome a la cabaña, mientras intento liberarme de su agarre.

Impulse con todas mis fuerzas mi cuerpo y gire, sintiendo tirar mi cabello en sus manos. Ignore el dolor, golpeo con fuerza su pierna, haciéndolo soltarme. Corrí a tomar el arma más cercana y antes de que se levante, le disparo en ambas piernas. Él grita.

Avance hacia Alek, quien se retorcía del dolor. Me detuve frente a él, y contemplé. Ahora no parecía ser de piedra o superior a mí. Apunte a su hombro derecho.

Apuñe con fuerza el arma en mi mano. Tire del gatillo.

Primer disparo, nadie elige en qué familia nacer.

Apunto ahora su hombro izquierdo.

Tiro de nuevo.

Segundo disparo, solo tengo dieciocho años, con un alma demasiado corrompida.

Apunto a su cabeza.

Entre medio de los gemidos ante el dolor, Alek me sonríe.

—Al parecer, no fuiste una desilusión, sino mi más grande creación.

Tiro una vez más.

Tercer disparo, solo quiero huir.

Baje el arma. Pero huir no era una opción, porque no es fácil escapar, ni ocultar el monstruo que llevas dentro. No quería ser como ellos, pero resulte ser peor, porque sí crías cuervos, te sacaran los ojos, pero sí criaste un monstruo, creaste tu destrucción.

NOTA DE AUTOR:

Ufs, nuestra Lys sobrevivio, pero ¿que otra prueba estara por enfrentar?

Amor cruel⭐Where stories live. Discover now