༺ Capitulo 4༻

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Todos los diálogos en cursiva son en el idioma de los dragones. Solo los apodos y las palabras para que los dragones obedezcan permanecerán en lituano.

Sueños de dragón II:
El lazo de cortejo

Castillo Oculto
Jardín Este

El sol se escondía, las luces del atardecer destacaban detrás de los árboles que cubrían gran parte del territorio de Castillo Oculto.
Sentado en las escaleras de piedra que descendían a los jardines, Harry observo como Drake volaba sobre los árboles, jugando con las copas de los arboles más altos y perdiéndose sobre las nubes de vez en cuando. La cría estaba creciendo cada vez más rápido, siendo más grande de lo que era Buckbeak.
Branwenn había dicho que Harry ya podía empezar a practicar volar con Drake. Volando juntos, su lazo se haría aún más fuerte y Drake crecería incluso más rápido.
Por supuesto, pensó Harry mientras bebía un sorbo de su copa de vino, Branwenn quería que Drake alcanzará un tamaño que pudiera intimidar cuando Harry volviera a Hogwarts.

-¿No eres muy joven para beber?

-En teoría, ya tengo quince años.

La falda negra de Branwenn rozo los brazos expuestos de Harry cuando ella se sentó a su lado en el escalón de piedra. Se aliso la falda con manos blancas y siguió la mirada del menor, sonriendo cuando vio a Drake atrapar un pájaro entre sus fauces.

-Sera todo un cazador.

Harry tarareo, jugando con la copa de cristal ahora vacía.

-¿Ya te vas?

-Volveré lo más pronto que pueda. No creo que me tome más que unos pocos días-lo miro entonces, reconociendo el miedo que adornaba el rostro del chico-Todo estará bien, mi niño.

-Debería ser más fácil. Nunca tuve a nadie, no debería tener miedo al rechazo. Pero pensar que él podría rechazarme…-negó con la cabeza-…Me aterra.

-No es algo malo.

-¿Y si no acepta a la persona en la que me estoy convirtiendo?-sus ojos no dejaron de mirar a Drake, aun cuando podía sentir los ojos de Branwenn sobre el.-Ya termine de ser el niño estúpido al que todos usan. Voy a lastimar a los que quieran lastimarme. Voy a matar para proteger a los míos.

-Eres un dragón, Harry. No te avergüences de ser lo que eres.

-No lo hago.-se apresuró a asegurar-Pero Sirius es la única familia que me queda. Además de ti, claro-le sonrió y Branwenn se la devolvió-Y perderlo…Seria muy doloroso para mí.

Branwenn pensó en esto, dejando que el silencio os cubriera a ambos durante unos minutos.
En esos momentos, Drake rugió sobre sus cabezas y descendió, sus alas negras levantando una brisa fuerte en sus últimos aleteos, las fuertes patas de garras enromes tocando el césped. Los ojos plateados no tardaron en fijarse en Harry y el dragón enseño los filosos dientes, en lo que solo podía ser una sonrisa para su humano.

-Creo que deberías despedirte y subir a la cama. Te esperan.

Harry asintió, pues era cierto. Draco esperaba soñar con él esa noche y le daría su respuesta a Harry.
Se puso de pie, dejando la copa vacía en los escalones para que un elfo domestico la buscara más tarde.

El legado Emrys I:Sangre de DragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora