Capítulo 14

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Ezra


Se supone que el comienzo de las vacaciones de verano sería una de mis temporadas favoritas. Ahora con un gran cambio en mi vida, el cual siempre he soñado, puedo decir que lo veo así en cierta parte, aunque lo que he planeado desde hace meses está en duda.

Hace dos semanas terminaron las clases, y claro que también regresé a casa de mis padres. Chuck regresó a San Diego al igual que Rebecca, y Dimitri está viviendo en un departamento cerca del pent-house. Por extraño que parezca, las cosas han estado un poco tranquilas, debo admitir que me siento un poco relajado últimamente desde que "convivo" con mi familia, refiriéndome a mis padres.

La mayor parte del tiempo me la paso en mi habitación, solo cuando no estoy con Hilary, hemos pasado tiempo juntos desde que comenzamos nuestra relación hace tres semanas. Sin duda me siento en paz a su lado.

Hoy es uno de esos días en los cuales no encuentro nada bueno en la televisión, hace un poco de calor en la ciudad y no soy fanático de salir cuando la temperatura está muy elevada. No me llevo nada bien con este clima. Ya he revisado cada una de las aplicaciones donde suben todo tipo de series y películas, pero ninguna me convence, así que mejor salgo de mi habitación a buscar algo de comer.

Cuando camino hacia las escaleras todo se ve tan tranquilo, en silencio. Y siendo honesto eso no se ve muy normal, por lo regular hay mucho desorden debido al trabajo de mis padres. Mientras bajo, escucho la voz de mi madre desde la cocina, y cuando entro la veo que habla con la mujer que se encarga de realizar las tareas domésticas y con el cocinero. No les doy tanta atención y voy directo al refrigerador.

—Pueden salir temprano el día de hoy —les dice—, el señor Turner les ha dado la autorización.

Eso me parece todavía más raro porque siempre les tiene trabajando hasta tarde. Los dos asienten y se despiden hasta el día de mañana.

—Ezra, ven aquí un momento —me habla mi madre cuando abro la nevera y busco un helado de sabor oreo que compré ayer que salí con Hilary.

—¿Qué sucede? —inquiero cuando la encuentro, ahora busco una cuchara.

—Tu padre va a tener una reunión importante esta tarde con personas que lo apoyaran en su campaña electoral.

—Ajá. ¿Y?

—No quiere nada de interrupciones.

—Sabes que nada de eso me importa —digo encogiéndome en hombros y salgo de la cocina, ella comienza a seguirme.

—Lo sé, solo que... quiero que permanezcas encerrado en tu habitación.

Me detengo en seco al pie de las escaleras y doy media vuelta para quedar frente a frente con ella.

Inolvidable desastre [En proceso]Where stories live. Discover now