El Ángel del Diablo ©(TERMINADO)#libro1 "Almas Corrompidas"[AÚN PARA CORREGIR]

CAPÍTULO 44

CAPÍTULO 44.

Adriano:

Observo como la chica a mi lado se aparta de mi, después de dejar atrás a los dos idiotas que no nos quitaron la vista de encima hasta que nos perdimos en los pasillos con dirección a la planta baja.

Ella se tambalea un poco y por el olor a alcohol que senti cuando se acerco puedo notar que esta bastante ebria.
Camina unos pasos i tentando apartarse pero se tropieza con sus propios pies, y me veo en la obligacion de tomarla del brazo para estabilizarla antes de que caiga al piso de cabeza.

No levanta la mirada ni me mira, —que novedad—. Blanqueo los ojos cuando trata de enderezarse mientras murmura algo que no se le entiende y vuelve a alejarse como si temiera que le saltará encima y la mordiese.

«chica lista»

Cuando Lorenzo llego a casa hace meses y le dijo a mi madre que había encontrado a Cassiano, asumí que lo habria encontraría muerto. Lo deseaba... deseaba que así fuera. Después de todo el se lo merecía por lo que había hecho. Pero... como el hijo de puta indestructible que es, y para mi mala suerte estaba vivo, y no solo eso, volvería con el trajo una pequeña y torpe sorpresita. «Amelia»

La chica es un desastre, le teme a todo lo que se le acerca, y sobre todo he notado que le teme particularmente a los hombres, excepto por Cassiano. Pero incluso se pone nerviosa frente a Lorenzo. Ni hablar cuando soy yo quien está cerca. Lo que en realidad me parece divertido.
Me gusta asustarla un poco, ver el brillo de sus ojos cuando cree que saltare sobre ella, como el día que la encontre en la cocina.

Por supuesto que ya sabía quién era cuando la acorrale, solo que se me hizo muy divertido molestarla. Infringir temor en las personas siempre ha sido algo que he disfrutado mucho y cuando la vi temblar como un corderito asustado en el matadero... me gusto aun mas. Ver el brillo de temor en sus ojos... fue extasis para mi. Pero lo que más me gusta de todo esto, es que sea la debilidad de mi primo.

Imaginen mi sorpresa cuando me enteré que el "diablo"...
el asesino más sádico de toda la maldita organización,  el... "Rey" estaba prendado de una chica de no mas veinte años, que recién acababa de terminar el bachillerato y vivía en un pequeño y mugroso apartamentucho.

Ella no era nada... no era nadie, y definitivamente no era el tipo de mujer con las que Cassiano se divertía, lo que me hizo preguntarme... ¿Por qué? ¿Qué tiene de interesante esta chica corriente?
Aparte de que se ocupo de el, cuando no sabía bien quién diablos era, no entiendo el motivo para traerla aquí. Perfectamente se le podría haber dado una suma de dinero como recompensa o un balazo. —eso hubiese sido menos arriesgado que traerla aqui  donde sabemos de sobra que no durara mucho—. Pero no... en lugar de eso la trajo con el.

Dudaba mucho que mi primo esté enamorado, los hijos de puta como el no sienten amor o cariño por nadie más que por ellos mismos y en los pocos casos donde lo sienten las personas terminan como... como Laura.—aprieto mi puño cuando su imagen viene a mi mente—.

Pero... esta mujer tiene algo... no se que... pero incluso a mi me despierta cierta curiosidad. Aun mas despues de ver el claro interes que tiene en ella Dante Lombardi... recuerdo cuando los encontré en el balcón, el la amenazaba y ella temblaba, no puede escuchar la conversación completa pero eso es algo que averiguare despues.
Ahora me pregunto ¿como una chica asi de temerosa pudo lidiar con un tipo como Cassiano, con todos los traumas que se ve a leguas que carga? «Porque mi primo es mil veces peor que Dante. Y sin embargo ella no le teme, ni un poco.»

Pero eso no es lo importante aquí... lo verdaderamente importante es que encontré la manera de joderlo y por supuesto que voy a sacarle provecho. Lo que nos lleva a la chica en cuestión... «Amelia.» Probablemnete la única debilidad de Cassiano... de la cual no dudaré en tomar ventaja para hacerlo pagar por lo que le  hizo a mi Laura.