Flying chocolate

648 60 8
                                    

Tori's pov.


Conciertos. Lugares. Noches.

Mi tiempo no se medía ni en días ni en horas, si no ciudades. Cada día una diferente, cada día un concierto más. Cada día veía sitios nuevos, caras nuevas, muchísimas caras nuevas. Parecía un sueño, ¿no? Estar de un lado a otro, sin parar. Literalmente, no parábamos ni un solo segundo a tomar aire, a descansar. Había que seguir, seguir y seguir, como si estuviéramos jugando y si paráramos perderíamos, Mario Bros perdería. Había que seguir, y seguir.

Y honestamente, me cansaba. Al principio era bonito, divertido. Ahora habían pasado unos cuantos conciertos, ¿semanas? ¿igual un mes, dos? Ya perdí la cuenta. Pero sabía que quedaba mucho por delante y los chicos estaban cansados. Andy estaba cansada. Ana estaba loca, es decir, era la única que seguía como al principio; aún así creo que todos notábamos el estrés. Tantas prisas, tan poco tiempo y tanto que hacer hacía que nos estresáramos.

-¿Hoy te apetece ir al concierto? - Solía preguntar Andy.

-Estoy cansada, ¿vamos al de mañana? - Solía responder todos los días.

Estaba claro que este mundo no era para nosotras dos, pero que lo soportábamos por ellos. Por los chicos.

Aún así hoy era un día especial. Bueno, se suponía que era especial.

Son las siete de la tarde y precisamente, hoy, en este día especial, no tienen concierto. Uno de los pocos días libres coincide con mi cumpleaños.

Y no hay ni un puto alma en ninguno de los autobuses. No es suficiente con el no acordarse (que a los chicos se lo perdono, pero a Andy no), que encima todos se largaron mientras dormía una siesta.

Hijos de fruta.


Andy's pov.

-¿Dónde narices se han metido Calum y Michael? - Grité. - ¡Dónde están esos dos estúpidos!

-Cálmate, Andy. - Masculló Luke. Se acercó a mi y me tocó el hombro suavemente. - Enseguida aparecerán y...

-¡No! - Interrumpí. - ¡Hace más de una hora que les pedí las estúpidas nubes de azúcar y siguen sin llegar! ¡No está tan lejos la gasolinera!

-Enseguida llegarán.

-¡Tienen que llegar ya! Se supone que esta fiesta sorpresa tendría que haber empezado a las seis. ¡Las seis! Y son más de las siete. Seguro que Tori se ha despertado y se preguntará dónde coño estamos.

-Te dije que deberíamos haberle puesto más pastillas en su te para que durmiera más tiempo. - Replicó Ana.

-Pf. -Empecé a dar vueltas por el patio nerviosa. - ¿Ashton?

-¿Sí?

-Haz el favor de ir a buscar a esos dos desastres de personas antes de que nos encuentre Tori.

-Está bien. Tranquilízate.

-¡No me tranquilizo! Dejar de decir que me calme, agh.

Ashton rodó los ojos y se marchó en busca de Calum y Michael.

-Será mejor que te sientes cielo. - Luke me acercó a un sillón e hizo que me sentara mientras yo bufaba. - Seguro que aparecen pronto y todo sale bien.

-Pobre Tori. Debe estar matándome con cuchillos mentales por 'olvidarme' de su cumpleaños.

-En cuanto llegue Ashton con los demás aquí ya podrá ir a por ella y traerla aquí.

Cerré los ojos y respiré hondo. Llevábamos toda la Santa tarde intentando preparar el jardín del hotel en el que estábamos hospedados esa noche y la siguiente, ya que teníamos estos días libres gracias al cielo. Nos había costado conseguir privatizarlo y que no vinieran otros huéspedes pero lo habíamos conseguido, nos había llevado una hora con la que no contábamos pero no creí que fuera muy grave. Después conseguimos que nos colocaron la fuente de chocolate del restaurante y cuencos con comida. Pero faltaban las nubes, que sabía que le encantaban a Tori. Era su dulce favorito, e iban a estar sí o sí. También habíamos bajado el portátil de Luke y unos altavoces; la música sonaba de cine.

-¡Ahí estáis! - Chillé. Calum y Michael entraron en el jardín tranquilamente con un par de paquetes de nubes. - ¿Dónde os habíais metido?

-Nos encontramos con nuestra estilista y estuvimos hablando un rato, tranquilízate. - Sonrió Michael.

-Como alguien más me diga que me tranquilice...

-Tranquilízate. - Se rió Calum.

Le pegué una colleja.

-¡Auch!

Le pegué otra a Michael.

-¡Eh!

-Por tardar. ¿Ashton dónde está?

-Ya estará trayendo a Tori. - Se encogió de hombros.

-¡Tú eres tonto! Tendrías que haberlo dicho en cuanto viniste. - Me toqué el puente de la nariz suspirando.

-Lo siento, pero una loca me estaba pegando.

Le di otra colleja.

-¡Venga! Luke, cielo, por la música. ¡Rápido! Ana, enciende la fuente y a tu sitio. Michael, Calum... Vosotros simplemente tiraros por un puente.

-Alguien está de mal humor... -Canturreó unos de los dos.

Ignoré el comentario, miré a Luke en cuanto la música empezó a sonar y él alzó el dedo pulgar. Miré la fuente de chocolate, estaba enciendida y Ana escondida. Michael y Calum corrieron detrás de un sillón a esconderse, Luke corrió hasta los altavoces y se escondió detrás tapándose los oídos.

Está bien. Todo está bien.

Escuché la conversación lejana de dos personas. Tori y Ashton llegaban.

Empecé a correr hacia mi escondite, apresurada, estaba todo bien. Ahora sí.

Y entonces tropecé.

No.

Podía.

Ser.

Verdad.


-¡Andy! - Gritó Luke levantándose a por mi, pero no sirvió de nada.

Desenchufé el cable de los altavoces y la música se cortó, empecé a descender hacia la mesa de la comida, descendía y todo me parecía ir a cámara lenta. Caí dándome con la mesa en cabeza, y aterricé en el suelo y noté un gran dolor en la frente a demás de algo duro en mi mano.

Y entonces vi chocolate. Por todos lados. Tenía el control de la fuente de chocolate bajo mi mano, con todos los botes apretados. La fuente se había vuelto loca, volaba chocolate en todas direcciones, me caía por encima, se disparaba hacia las vayas de madera blanca, sobrevolaba e impactaba contra la tela blanca de la carpa, caía sobre todos nosotros. Luke fue rápidamente hacia el ladrón y desenchufó todo, el chocolate dejó de volar y todo quedó extremadamente quieto.

Entonces vimos a Ashton y a Tori (con los ojos vendados) entrar.

-Ashton, ¿por qué huele a chocolate? - Se rió ella mientras Ashton abría la boca sin saber qué decir. Observó todo el jardín y me miró confuso.

"¿Qué mierda ocurrió?" Me decía con esa mirada. No sabía que decir.

Todos nos miramos.

-¿Ashton? - Tori se apartó la venda y dejó de sonreír.

-¿Sorpresa?

Unpredictable «5sos» #ADH3जहाँ कहानियाँ रहती हैं। अभी खोजें