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La música estaba súper alta, literalmente tenía que hablar a gritos, el lugar estaba lleno y tal vez Jimin tenía razón con lo de que estaba deslumbrante, todo el mundo miraba hacia mi cada vez que les pasaba por lado, ví sonrisas y guiños por parte de muchos.


Mi ego estaba en el cielo



Estaba disfrutando del ambiente, la música resonaba y yo bailaba al ritmo de esta, Jimin estaba cerca de mi mientras bailaba con una sensualidad increíble. No se donde estaban Ela y Namjoon, tan pronto como llegamos desaparecieron.

Un fuerte bullicio proveniente de la entrada se hizo presente, me dió curiosidad saber que pasaba así que me acerqué.

Error

Justo en la entrada estaba Jungkook y si antes yo me creía guapo todo mi concepto se fue a la mierda después de verlo a el.


Iba todo de negro, camisa de mangas cortas que enseñaba su brazo derecho lleno de tatuajes hasta los dedos, unos jeans negros bien ajustados, rotos en las rodillas y unas botas todo terreno un poco más arriba del  tobillo, El cabello negro suelto en ondas y un piercing que no había visto antes adornaba su labio inferior.

¿Acaso podía ser más sexy?

—Cierra la boca que se te sale la baba —Jimin hablo a mi lado y volví en mi.
—Solo estoy viendo que pasa.

Jimin se río como si le hubiera contado el mejor chiste del mundo y de fue a buscar bebida para los dos.

Decidí continuar con mi noche y tratar en lo posible de ignorar y alejarme completamente de Jeon como Ela dijo:

Era mejor estar lejos de el

—¿Te diviertes guapo?

Una voz a mi espalda me habló, un chico de cabello rojo, unos pocos centímetros más bajo que yo.

—Si bastante —el ruido era tan alto que tuve que gritar.
—Soy Hoseok —dijo el desconocido de cabellos rojos.
—Un gusto Hoseok, yo soy Taehyung.

El desconocido era agradable, Estudiaba ingeniería en segundo año, venía de una familia rica y tenía una hermana.
La plática era placentera, hasta que la presencia de cierto pelinegro lo arruinó.

—Hey Hoseok —su voz me parecía irritante.
—Jeon bro.

Y para colmo eran amigos.

«No te acerques a Jeon ni a nadie que ande con el»

Tal vez no fueron las palabras exactas de Ela, pero entendí lo que quiso trasmitir. Nadie que andaba con Jungkook era bueno, y tal vez Hoseok tampoco. Pero el parecía tan...

Transparente
Gentil

Tal vez no era como Jungkook y sus secuaces del mal.

—Rubiecito.
—Te dije que ese no es mi nombre —dije con más seriedad de la que debía.
—Y yo te dije que te llamo como quiera.

Se hizo silencio, bueno si se puede decir silencio porque el barullo de la fiesta seguía presente.

—¿Se conocen? —preguntó el pelirrojo algo confundido.
—Puedo decir que si —respondió Jungkook con una sonrisa ladina, mientras me miraba de arriba a abajo.

Que buen momento para que Jimin se apareciera con las bebidas.

Y como si lo hubiese llamado, llegó junto Ela y Namjoon.

—Holaaa —Jimin le puso entusiasmo a su llegada y miró extrañado al ver raro el ambiente.
—Jungkook —la voz masculina y fuerte del hermano de Ela se hizo presente, es como si fuera tan sobresaliente que no le hizo falta gritar para ser escuchado.
—Namjoon.
—¿Si se van a matar adelante? —dijo Ela y creo que fue la primera vez que la ví sonreír con ganas.
—Sueñas mucho —respondió Hoseok y comenzó a reír igual.
—¿Que carajo está pasando aquí?

Admito que me asusté un poco por el grito que dió el rubio de ojos gatunos. Ese chico no era fuerte como Jeon ni alto como Nam, más bien era pequeño y algo delgado, pero había algo en su mirada que te enfriaba la sangre.

—Y hace su aparición el muerto viviente —volvió a hablar Ela.

Algo le pasaba a esa chica estaba diferente.

—Vete a la mierda Ela.
—No capté el chiste —Jimin habló y todos las miradas fueron a él menos la de Jeon que no había parado de mirarme.
—¿Quienes son ellos? —hablo Yoongi refiriéndose a nosotros.
—Son becados —dijo Ela.
—Vaya.
—Creo que voy a tomar aire.

Dije y salí lo más rápido posible de ahí. El ambiente me había comenzado a asfixiar.
El exterior del campus estaba vacío, todos los estudiantes estaban en la fiesta y tal vez uno o dos que estuviesen durmiendo.

Pensé en mi mamá, la noche anterior había hablado con ella. La estaba extrañando tanto. Siempre fuimos ella y yo, mi padre nos abandonó cuando cumplí un año. Había sido duro para ella pero nunca se había mostrado débil ante mi.

La admiraba mucho.

—¿Te gustan las estrellas? Puedo hacer que las mires en la cama.

Será que no me dejará tranquilo.

—Jódete Jeon

Mala idea

En un segundo estaba sobre mi, mientras apretaba mi mandíbula con fuerza.

—¿Que mierda fue lo que dijiste?

























Valiste madre Tae
Y como siempre
No olviden dejar su

ᶜʰᵉʳʳʸʚɞ

Beca de OroМесто, где живут истории. Откройте их для себя