08 | Lo que haría por un amigo

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Esa mañana Beomgyu se había despertado completamente destrozado tras haberse enterado de que Taehyun había perdido su cuaderno; pero escuchar a Yeonjun, el chico por el que llevaba obsesionado meses, preguntarle de repente si a su mejor amigo podría gustarle, fue su límite.

Su garganta comenzó a doler, al igual que su pecho y cabeza. Aquello debía de ser una broma de mal gusto. Sentía como su mundo se caía a pedazos, todo lo que pensaba que sabía parecía una mentira en aquellos momentos. ¿Había malinterpretado el comportamiento del mayor? ¿Acaso se había perdido un encuentro entre ambos chicos que hizo que Yeonjun se interesase por su amigo? No era posible, definitivamente Taehyun se lo habría contado.

— Eh... ¿ya tiene pareja o algo así? — preguntó el peliazul al no recibir respuesta, preocupándose incluso por el aspecto pálido que había adquirido el contrario de un momento para otro. Quizás había metido la pata, quizás Beomgyu no sabía que Taehyun estaba interesado en él y que lo había dibujado en repetidas ocasiones; quizás él tenía más información que el castaño. Quizás.

El menor se obligó a tragar saliva, sintiendo su boca seca y su cabeza darle vueltas. Tenía la sensación de que si no salía de allí rápidamente comenzaría a hiperventilar. No sabía qué hacer.

— No- Él no... Ósea, está- está soltero. — Cada palabra que salió por sus labios hacía que una fuerza invisible presionase sus sienes, como si quisiese aplastar su cráneo, como una especie de castigo por no haberse dado cuenta de aquello, por haberse encaprichado por la persona errónea. Pero como le había explicado a su mejor amigo, lo que sentía por Yeonjun no era un simple crush.

— ¿Entonces el problema es que he sido demasiado directo, verdad? — preguntó Yeonjun, asumiendo que la mueca que recibió del castaño era una afirmación. — Suele ocurrirme, lo siento — se disculpó llevándose una mano a la nuca. — Tampoco planeaba hacer así las cosas, quería conocerlo mejor, acercarme a él. Pero de verdad estaba muy interesado. — Miró hacia Beomgyu, dándose cuenta de como el chico tenía la mirada perdida, claramente con su mente en otro lugar, lejos de allí.

Dios, la he cagado.

— ¿Estoy siendo creepy? No es mi intención, de verdad. — Se mordió el labio con nerviosismo, echándose hacia delante para darle cierto énfasis a sus palabras. — Solo quiero conocerlo mejor, te juro que soy muy buena persona, no tengo ninguna intención rara.

Pero aunque el peliazul estuviese en medio de una crisis intentando buscar las palabras adecuadas, por la mente de Beomgyu solo pasaba una cosa. Está muy cerca, mucho, demasiado, muy cerca.

Yo- mira... no se... — intentaba hablar el castaño entre tartamudeos, tan solo queriendo largarse de allí y replantearse seriamente lo que acababa de ocurrir. ¿Pero aquello estaba bien? Alguien que sabía, al menos por lo que había observado, que era muy buena persona y que sin duda haría feliz a su mejor amigo, le acababa de insinuar que Taehyun le gustaba. Como mejor amigo del pelinegro, ¿qué era lo que debía hacer? — No se que decirte, ni siquiera te- te conozco — comenzó a decir cruzando los dedos bajo la mesa. — No se si eres bueno para él o su tipo o- no se...necesito pensarlo...

Sin duda Beomgyu sonaba como un padre preocupado, al menos esa era la impresión que le estaba dando a Yeonjun; pero por una parte lo entendía. Si de repente un completo desconocido se acercaba a él y le decía que quería gustarle a Soobin, desconfiaría mucho de esa persona; él conocía a todas las personas que eran cercanas a su amigo, y suponía que Beomgyu y Taehyun tendrían una relación similar.

Seguro que estaba sonando como un completo acosador, alguien que había estado observando a Taehyun. Pero después de lo ocurrido no podía controlar sus propios impulsos. Nunca había estado tan sumamente interesado en algo, mucho menos en una persona. Aquellos dibujos y textos le habían llegado al alma, sentía que él y Taehyun ya se conocían, y de alguna manera quería devolverle los sentimientos que este había plasmado en las páginas de su cuaderno. Era como si, por primera vez en su adolescencia, tuviese un crush.

The Sketchbook | Yeongyu.Where stories live. Discover now