Capítulo 13: Mi primer entrenamiento

1.1K 98 4
                                    

Caminaba en silencio por el pasillo tras Steve. Cuando llegamos pareció dignarse a hablarme.


—Bien, empezaremos por algo de cardio. Vamos, a correr.


Empezó a dar vueltas por el gimnasio, yo le seguí. Al menos, eso intenté. Corría muy rápido y a los cinco minutos ya había perdido la cuenta de las veces que me había adelantado.


De hecho, toda la hora siguiente fue así. No paré en ningún momento y estaba completamente agotada, estaba empezando a pensar que era la "venganza" de Steve.


—¿Hemos terminado ya?—pregunté muy cansada.


—Casi, aún falta el cuerpo a cuerpo.—dijo sin parecer cansado.


—¿Cuerpo a cuerpo?—Repetí yo aterrada.


—Sí, todos los días al terminar tendremos un cuerpo a cuerpo para ver como mejoras. Llámalo autodefensa si lo prefieres.—dijo indiferente.


Pensando en que acabaría pronto, acepté sin rechistar. Me equivoqué.


Ambos fuimos al centro de la sala. ¿Debía empezar yo o lo haría él? Al verme quieta supongo que le dio por empezar a él. Se acercó andando, otro que me subestima, pensé. Intenté alejarme, pero sin verlo me cogió del brazo y me puso de espaldas contra él agarrándome fuertemente.


—¿Cómo te soltarías de este agarre?—me susurró Steve al oído.


No sabía como hacerlo. Intenté zafarme con todas mis fuerzas, pataleando y haciendo lo imposible. Pero no lo conseguí, lo único que conseguí fue cansarme.


—Sigues siempre a lo ilógico. Se nota que todavía te faltan entrenamientos con Romanoff.


—Entonces suéltame si no te importa.—dije un poco harta ya.


Pero no lo hizo. Es más, me llevó al suelo. Esta vez quedamos de frente.


—Espera haber si lo adivino, ¿cómo me soltaría ahora?—le dije irónicamente, cansada del entrenamiento.


Pero el no dijo nada, solamente, empezó a besarme. Aquello me llegó a sorprender, no me lo esperaba junto en ese mismo momento. Cuando se separó, se puso serio.


—Lo siento, pero... estaba celoso.—dijo levantándose y ofreciéndome la mano para ayudarme.


—No pasa nada Steve, creo que me voy a ir a ducharme ya, si hemos terminado.—dije evitando mirarle.


—Vale.—dijo soltando mi mano lentamente.



Llegué a mi apartamento cansada y me fui a la ducha directamente. No sé cuanto estaría allí metida, pero cuando estuve lista, ya era la hora de comer. Me dirigí al comedor. Localicé a Nat, Bruce, Clint y Tony comiendo juntos en la mesa de siempre.


—¡Date prisa, te esperamos!—me gritó Nat al verme.


Yo solo asentí y me dirigí hacia el buffet. Una vez allí me entró aún más hambre de la que tenía. Cogí una ración de arroz cocido al que le puse bastante mostaza. Un poco raro, lo sabía, pero es lo que me apetecía cuando tenía mucha hambre.


Cuando me acercaba a la mesa sentí la mirada de todos en mi. Mejor dicho, en mi bandeja.


—Sé que es raro, pero es lo que como cuando tengo hambre, así que me gustaría que no os riérais.—dije un poco disgustada.


—No es eso...— dejó caer Nat quien todavía seguía comprobando los alimentos de mi plato uno por uno.


Entonces Thor se acercó a la mesa, sentándose a mi lado.


—¡Qué habre!


Cuando dijo esto no pude evitar mirar a su bandeja. En ella se encontraba exactamente lo mismo que había en la mía pero en mayores cantidades. Parece que Thor también se había dado cuenta.


—Vaya, parece que el rey de Asgar no es el único en su especie aquí en la Tierra.—dije Tony a modo de broma.— Si resulta que os conoceís y todo.


Entonces todos nos echamos a reir.


—¿También te pasa cuando tienes hambre?—pregunté yo entre risas.


Thor asintió como pudo.


—¿Qué es tan grancioso?—preguntó Steve, quien acababa de llegar.

Not Strong Enough (Capitán América/Loki/Soldado de Invierno/Thor)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora