Simplemente tú

Capítulo 9. Mónica

Tengo que ser sincera con Juanjo, debería decirle que Carlos me va a complicar la separación. Pero el miedo se apodera de mí, sólo de pensar en sacar a la luz, ciertas situaciones, con las que me amenaza en revelar.

Me abre la puerta del coche, para que salga. Mientras lo hago, me quedo asombrada de las vistas. Estamos en la falda de una montaña, rodeados de altos árboles, que cubren los caminos que dan a la casa.

Subiendo las escaleras del porche, me giro para admirar las montañas, que nos dan la bienvenida. Al entrar en la casa, veo a mi abogado abrir las ventanas. Si no estuviera despierta, diría que esa casa, es de película.

Esta maravilla, es de piedra por fuera, pero por dentro, está revestida de madera de roble, color claro que hace más amplia las estancias. Las ventanas tienen doble acristalamiento, en invierno debe de hacer frío.

Más entrar, nos encontramos con un saloncito, decorado con gusto y con dinero. Preside una chimenea de pellet y leña, que tiene enfrente un sofá en forma de U, que se ve muy cómodo. Me fijo en la alacena y la mesa del centro, están fabricados, por la misma madera que las paredes y el suelo.

Solo he visto el salón y ya me encanta la casa.

-Ahora mismo, estás sacando tu vena de inmobiliaria, estudiando lo que ves -me río ante su comentario.

-Tan evidente es? -asiente -es un refugio chulísimo Juanjo, también es tuyo? -niega.

-Es de un buen amigo y también socio, me lo dejó para esconderte -se acerca y me da un beso -tenemos vino...

Le sonrío y asiento. Me hace sentarme en el sofá, él está alejado de mí, algo me dice, que vamos a tener una charla seria.

-Mónica, tenemos un problema -le miro asustada -no puedo ser tu abogado. Podría perder mi licencia, a parte de tener problemas en mi divorcio, al igual que tú -asiento, lo sé muy bien.

-Pero yo confío en ti.

-Lo sé, es bueno tener confianza mutua, porque seguramente, en el proceso de separación, van a salir muchas cosas y se dirán muchas más mentiras. Conozco a Marge, va a hacer lo imposible por no firmar.

-Carlos tampoco me lo va a poner fácil -pienso en el mensaje que me envió hace unos minutos.

-El mensaje de antes, era él, verdad? -asiento -guarda todo lo que te llegue de él. Se lo tendrás que enseñar a tu nuevo abogado. Mañana tú y yo, vamos a comer con un colega, que lleva mi separación, también va a ser tuyo.

-Es de confianza? Me refiero, sabe algo de nosotros? -se ríe.

-Estaba con él, el día que sin querer te tiré el agua por encima. Es amigo desde la universidad y va a ser mi socio en el nuevo bufete.

Me lo quedo mirando, pensándolo bien, no sé nada de su vida, de su historia para separarse, sólo a querido hablar de mí.

-Mónica, cuando te quedas callada y mirando así, das miedo -se sienta a mi lado, me coge una mano -va a ser un trayecto largo y muy angustioso. No quiero mentiras contigo, tenemos que ser sinceros, por el bien de nuestra relación.

-En algún momento, me vas a contar tu historia? O me tengo que poner a investigar... -digo acercándome despacio, tanteando el terreno. Se levanta y va hacia la cocina, dice que va a hacer algo de comer, que siga conociendo la casa.

Os puedo asegurar, que el corazón se me acaba de partir en mil pedazos. Donde está mi chico cariñoso, mi abogado que me salvó de mis padres, donde está el hombre que me hizo suya en la ducha.