Capítulo 6- Bailemos juntos hasta la muerte

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// Narra el narrador //

El tiempo pasaba lento y la ansiedad de Sigma era cada vez más grande, su mente se llenaba de miles de escenarios en los que todo salía mal en su indefinida relación. Finalmente había llegado la tan esperada hora de salir de la agencia, Sigma bajo rápidamente a la cafetería que se encuentra bajo la ADA y al mirar la escena se sintió desilusionado pues Dazai quien debía estarlo esperando estaba hablando muy animadamente con una de las meseras, resoplo antes de acercarse con seriedad a ambos castaños, pasó al lado de ellos sin mirar mientras caminada hacía la salida, Dazai lo vio pasar e inmediatamente supo a que se debía la indiferencia de su amado, claro que no permitiría que el bicolor se fuera así sin más.

Querido, no seas tan cruel al ignorarme de esa manera - se apresuró a alcanzarlo para lanzarse contra Sigma y aferrarse a su brazo mientras el bicolor forcejeaba contra él.

Estabas ocupado, no iba a interrumpir tu conversación por algo tan insignificante como lo es regresar juntos. - Sigma rodo los ojos y dejo de forcejear con el castaño, no podía quitárselo de encima.  

Ahhhh ya comprendo, mi florecita esta celosaa. - canturreo el castaño en un tono burlesco. 

Tsk ¿quién esta celoso? después de todo no somos nada. - el bicolor se tensó, había pensado en voz alta, acababa de arruinarlo todo, definitivamente Dazai no iba a quererlo más luego de decir algo tan grosero.

Dazai lo tomo de los hombros para acercarlo a él pues noto que Sigma había comenzado a atormentarse por dentro con falsas suposiciones, después de todo quizá era su culpa por no dejar todo claro desde un inicio.

Sigma, quiero que vengas a mi apartamento esta noche, pero primero prométeme que no pensaras nada malo o catastrófico. -  sonrió suavemente provocando un revoltijo de emociones en el bicolor quien se limitó a asentir para continuar con sus caminos. 

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Nuevamente el paso del tiempo parecía ir en su contra, pero finalmente se encontraba tocando el timbre del apartamento del castaño. Llevaba puestos sus tacones más altos, pues los usaba en momentos importantes junto con una larga trenza que mezclaba sus dos colores de cabello.

La puerta se abrió rápidamente por el castaño que quedo inmóvil por un segundo al admirar lo lindo que se veía el contrario, un notable sonrojo se instaló en las mejillas de ambos luego de que Dazai besara el dorso de la pálida mano de Sigma en manera de saludo.

Te ves incluso más hermoso que de costumbre. - dijo mientras lo guiaba al ahora nervioso y sonrojado bicolor a la sala de estar. Sigma se sorprendió al mirar el lugar, la radio sonaba suavemente con melodías lentas y agradables, la mesa tenía unas cuantas velas prendidas y la luz que iluminaba el lugar era el brillo de la luna llena que entraba por el ventanal de la sala creando un ambiente hermoso. 

Me temo que me retrase un poco con la cena que prepare para ambos ¿Te molestaría esperar un poco? - Preguntó el castaño dirigiéndose hacia la radio que comenzaba a reproducir una balada lenta, Dazai subió un poco el volumen de este para luego inclinarse un poco frente al bicolor y pedir su mano.

¿Quieres bailar conmigo? 

// Narra Sigma // 

Mi corazón se aceleró por su propuesta, sentí mi rostro enrojecer aún más al recordar con nostalgia la vez que me obligo a bailar con él en prisión, jamás imagine que nosotros llegaríamos a este momento juntos. Tome su mano aceptando su invitación y él se incorporó correctamente para tomarme de la cintura y acercarme a él comenzando así a moverme de un lado a otro mientras bajaba y subía sus manos para guiar mis movimientos, mi rigidez poco a poco fue desvaneciendo y nos movíamos con más fluides y sutileza, estábamos tan cerca que era capaz de sentir sus fuertes y acelerados latidos en contraste con los míos, era un momento tan especial que me pareció lamentable que tan solo la luna fuera testigo de lo que sentíamos.

La canción acabó y Dazai me apretó contra su cuerpo impidiendo que nos separemos, lo cual no me incomodo pues yo tampoco quería alejarme de su calidez. 

Corazones entrelazados   SigzaiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora