Capítulo 112: Saldar cuentas después del otoño

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(N/t: ‹Saldar cuentas después del otoño›, esperar la oportunidad de tomar represalias después.)

Rong Yuheng decidió no acercarse todavía y en silencio se convirtió en una audiencia externa.

Se agachó y se deslizó detrás de la gran planta en maceta a su lado, como un gato naranja mirando en secreto...

En la sala de espera, el gerente obviamente entró en pánico. Miró a Xun Guang, como si quisiera ir directamente a la línea, pero tragó saliva bruscamente considerando la presencia de Rong Congyan.

"No, Sr. Xiaorong... Nuestro vestíbulo no permite que extraños no identificados se sienten en la sala de espera. Recibiremos al Sr. Wei y a los demás aquí en un rato..."

"No hay ningún problema con hacer negocios oficiales, pero usted es la cara del Grupo Rong, ¿es así como usted trata a sus invitados? Incluso llamó a los guardias de seguridad para ahuyentar a la gente. Esta es solo una niña, ¡qué pasa si la asustan!"

"Pero esta niña en comparación con el Sr. Wei..."

"Nadie puede compararse con nadie". Rong Congyan frunció el ceño. "Después de haber estado en la industria durante tantos años, ¿usted todavía no entiende esta verdad?"

El gerente se quedó sin habla por un momento.

Rong Yuheng estaba arrancando las hojas detrás de las macetas... El gerente también es como la mayoría de las personas. En su forma de pensar inherente, divide a los demás en tres o seis o nueve grados según su estado. Está bien pensarlo en tu corazón, pero debes tratar a todos por igual cuando estás en una posición. Esta es una regla de la industria.

Rong Congyan le dijo al gerente: "Discúlpate con la hermana pequeña".

"Yo ..." El gerente abrió la boca, pero no pronunció más sílabas. Miró a Xun Guang, sintiéndose un poco avergonzado.

Él era un hombre grande, el gerente del Grupo Rong. Hay muchos empleados que están por debajo de él, pero se le pidió que se disculpara con una niña que vino de la nada. "Sr. Xiaorong, yo... no lo haré la próxima vez".

"No debería disculparse conmigo, sino con ella".

Rong Congyan se apartó del camino de Xun Guang detrás de él, le puso la mano en la espalda y la empujó suavemente hacia adelante.

Xun Guang miró a Rong Congyan, sin saber lo que estaba pensando, pero obedientemente dio dos pasos hacia adelante.

Pero Rong Yuheng sabía que Xun Guang no estaba de humor para seguir jugando. Rong Congyan iba demasiado en serio apoyando a Xun Guang y esta última no era tan despiadada.

Rong Yuheng pensó por un momento, luego salió de detrás de las macetas y caminó hacia las pocas personas.

"Hermano, la maes..." A mitad de su llamada, ¡vio a Xun Guang parpadeando salvajemente hacia él! Rong Yuheng volvió a sus sentidos y dijo: "... la hermana pequeña Xun".

Xun Guang: "..." Ella pensó en trance que iba a enterrar flores.

Cuando Rong Congyan vio a Rong Yuheng, comenzó a regañadientes el modelo de educación del señor supremo.

"Ya que trajiste a la Xiaoxun aquí, deberías haber dispuesto que alguien del vestíbulo la cuidara. Aún no estás haciendo las cosas con suficiente madurez".

Rong Yuheng se quedó sin habla y casi se atraganta—

¡Es adulta! ¡¡Incluso mayor que yo!!

Puede vencer a diez personas ella sola, sin embargo, quiere disponer a alguien para que la cuide. ¡Ojalá todo el personal del grupo Rong la evite en el futuro!

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