Responsabilidad.

14 4 0
                                    

Jᴏsʜᴜᴀ

- ¿Y ya hablaste con él? - pregunta Mau, con una sonrisilla en el rostro. -
- ¿Me has visto con él últimamente? - respondo con un tono sarcástico. -
- Bueno, no exactamente - dice entrecerrando los ojos - pero hace como 2 días le pase tu número, creí que te había escrito.
Abro los ojos sorprendido - ¿Le diste mi celular sin mi permiso? - resoplo casi enojado - lo último que quiero es tenerlo en mis contactos.
- Por dios Josh, solo es un trabajo de clase.
- ¿Ah sí?, entonces ve y habla con Fernando.

El pelinegro rueda los ojos y yo sonrío triunfante.

- Bien, creo que entiendo lo que sientes.
- ¿Ya elegiste un tema? - cambio la dirección de la conversación abruptamente. -
- En realidad no - dice decepcionado - con esa lista tan larga de cosas... y aunque lo eligiera, todavía tendría que esperar a ver si ese tipo aparece para que lo "acepte" - dice entrecomillando con sus manos al aire. -
- Supongo que tienes razón.

Mau me mira de arriba a abajo, como inspeccionándome, para luego decir.

- Algo me dice que tú ya sabes de que lo quieres hablar.
- ¿Qué comes que adivinas? - pregunto divertido - sí, en realidad sí.
- Cuéntame.
- No te daré más ideas, mejor apúrate a hacer lo que debes hacer - digo señalando el dibujo que está haciendo atrás de su libreta. -
- ¿Esto?, es basura.

A veces me pregunto si este idiota es ciego. No solo sabe tocar instrumentos varios, sabe computación, inglés, fotografía, sino que también sabe dibujar, ¿hay algo que no pueda hacer? El dibujo a lápiz es lo que mejor le sale, no sé cómo logra que todo se vea tan realista, y a la vez tan abstracto; de repente está sentado mirando fijamente su cuaderno, con una mano apoyada en su cabeza, como cuando hay un problema matemático que no podemos resolver, no cierra los ojos, no parpadea, y de un momento a otro, toma un lápiz y comienza a hacer trazos, casi como un loco. Figuras, rayones, un poco de sombras por acá, brillos por allá. En un abrir y cerrar de ojos tiene un lindo paisaje, no importa que, tal vez es casi lo mismo que lo que ves cuando volteas hacia la ventana, un atardecer, o cuando el sol está en su punto más alto. Otras veces es el salón, algunos detalles que no había notado, pero que, con su dibujo, ahora no salen de mi mente. Otras ocasiones, nuestros compañeros, de espaldas, el cabello recogido de la chica de enfrente, o el chico de capucha negra a su lado, incluso el maestro que escribe en el pizarrón. Objetos, personas, paisajes, pensamientos y emociones, todo lo puede trasmitir en grafito y papel. Luce tan fácil, pero cuando lo intentas no lo es; y, aun así, con todo lo que hace, con las 10 páginas que llena en cada cuaderno, en la parte de atrás, esas maravillas en blanco y negro, aún con todos los cumplidos que le he dado, o los que alguna persona que pase a su lado y lo vea le asegura igualmente, sigue diciendo y pensando que no está bien. Tal vez está siendo modesto, pero puede que realmente piense que no es suficiente.
Me gustaría que algún día me dibuje, así, con todo detalle, con las imperfecciones que tengo, esas que odio, pero que amaría verlas en un lienzo, aún si las dibuja tal y como son, pero sería su creación, algo que hizo con sus propias manos, y eso lo cambia todo. Haría que amase mis defectos, haría que, por primera vez, me quisiese como soy, y, al mismo tiempo, quisiera demostrarle que es genial en muchos aspectos, que no es talento, es trabajo, que yo si lo sé, que sé que todo lo que hace lo ha logrado por su esfuerzo, porque lo conocí cuando él no sabía "nada", y vi como creció, vi que sacrificó muchas cosas para llegar a donde está. Le diría que lo entiendo completamente, que sus platicas de una hora explicándome porque le enoja tanto que la gente lo juzgue por como luce o lo que han oído de él, le diría que lo sé, porque también me pasó.

- Heeeeey, ¿estás aquí? - el chico alarga la frase, sacudiendo su mano frente a mí, sacándome de mis pensamientos. -
- ¿Eh?, claro idiota, sígueme contando.
- No mientas, en un momento te perdiste en tus pensamientos.

¡No Soy Predecible!Where stories live. Discover now