Capítulo 6

453 40 8
                                    

Había tocado el timbre para salir a recreo. Aiden acomodó sus cosas, se levantó de su asiento y se dirigió hacia la salida del salón. Iba a aprovechar este tiempo libre para mandarle mensaje a James y saber por qué no había venido. Aunque antes de poder siquiera abrir el chat del moreno, algo más llamó la atención del chico de cabellera bicolor.

¿Acaso James ya tiene novia o tan solo fue la calentura del momento? ¡Muchas chicas afirman que vieron a James buscando desesperadamente un condón en la fiesta del sábado!

Oh. Con qué eso es lo que pasó luego de que me fuera. Pensó el chico.

Aiden estaba parado en el pasillo viendo la portada del periódico escolar que ya estaba pegada en una de las paredes de la escuela. Usualmente no le presta atención a estas cosas, pero inconscientemente sus ojos leyeron "James" y su mente rápidamente ya había registrado lo que decía el titular.

Aiden miró su teléfono y simplemente lo guardó en su bolsillo. ¿Será verdad? El moreno con suerte llevaba una semana en la escuela y según esto ya tuvo sexo con alguna de las chicas. Aiden estaba molesto, pero no estaba tan desilusionado como pensaba que lo estaría. Desde un inicio el sabía que tipo de chico era James, pero aún así se dio el lujo de ilusionarse y creer que podrían ser amigos.

Claramente se había equivocado. James era un hijo de puta como cualquier otro chico de su edad.

Aiden tan solo suspiró y se dirigió a su lugar a las afueras de la escuela para almorzar.


James notaba que Aiden lo estaba evitando.

El más alto había faltado el día anterior. Se había quedado dormido, así que aprovechó el día para ir a hacer compras y ordenar su pequeño departamento.

Estaba emocionado de ver a Aiden esa mañana. De todas las personas que a conocido en este corto lapso de tiempo, el más bajo era quien más le agradaba. No sabía nada de él desde la fiesta, así que el brasileño supuso que podrían pasar el tiempo en clases conversando.

Estaba muy equivocado.

Cuando llegó al salón esa mañana y tomó asiento en su lugar de siempre, notó que Aiden ni siquiera se había molestado en saludarlo. ¿Quizá no había notado su presencia?

–¡Hey, Aiden!

–Uh, buenos días, James. –Dijo el menor de forma cortante.

–¿Sucede algo?

James no obtuvo respuesta.

Quizá no quiere hablar en estos momentos... pensó el moreno. Quería evitar pensar que el más bajo estaba de mal humor por algo que él había hecho, no le gusta sentirse culpable sin saber por qué.

Ya había pasado una hora de clases, por lo que cuando el profesor de turno se despidió de la clase y salió del salón, James aprovechó para preguntar nuevamente.

–Si algo está mal, puedes contarme, ¿sabes? –Intentó sonreír de la forma más natural posible.

–Ugh, James, no hables, ¿si? No quiero juntarme con alguien como .

–¿A qué te refieres? –El moreno estaba a la defensiva después de escuchar eso.

–Idiotas.

Auch. –Wow wow, ni sé qué te hice y ya me andas insultando. Pfft, no me hagas reír.

–Lo que sea. –Y con eso, volvieron a estar en pleno silencio hasta el timbre del almuerzo.

James salió del salón, sin molestarse en esperar a que el más bajo ordenara sus cosas como lo había hecho durante la semana pasada.

El brasileño sintió como alguien colocaba su mano en su hombro.

–Heeey James, campeón. Con qué ya le pusiste el ojo a unas de las chicas, ehhh. –Era Yul.

–¿De qué estás hablando?

–No te hagas, muchos están hablando de cómo cogiste con una chica en la fiesta del Sábado, ¿o acaso estuvo tan malo que ya lo olvidaste?

–¿Huh? –El moreno estaba perplejo. Puede que estuviera intoxicado el fin de semana, pero estaba seguro que debía de recordar algo así si es que había sucedido. –¿Quiénes están diciendo eso? Porque estoy 100% seguro de que eso no pasó.

–Ay pues todos duh, de qué es el titular del periódico. –Yul claramente quería que James le diera chisme.

–Pero quién te dijo. Y Yul, ya sé que tú eres uno de los editores del periódico, así que no me digas que no sabes.

–Ughh está bien. Varias chicas dijeron que te les acercaste para pedirles un condón o algo. Realmente ninguna dijo que tuviste sexo, pero saqué mis conclusiones y daba para buena chisma. De que, necesito mi entretención.

–Pero no me metas a mi en eso, no quiero que las chicas crean que ya tengo novia. –Dijo James algo molesto. –Y no era un condón, era un tampón.

–Ahh con que era eso. El pobre galán quiere estar disponible para todas. Está bien, pero me ayudas a buscar mejores titulares. –El asiático dijo con malicia. –Espera, ¿un tampón? ¿Y tu para qué querrías un tampón?

James abrió la boca para contestar, pero se dio cuenta que ni él estaba seguro de por qué. Pestañeo varias veces antes de responder.

–La verdad es que ni yo lo sé.

–Lo qué sea. –Dijo Yul mientras se volteaba. –Si me disculpas, iré a comer.

Y con eso, James quedó solo en el pasillo.

Hmm, ¿debería intentar hablar con Aiden? Se preguntaba el moreno. Debía de admitir que le había molestado la actitud del más bajo, pero no podía evitar estar preocupado por él. Además, había recordado con más claridad lo que había sucedido en la fiesta del sábado, nunca supo por qué Aiden le pidió un tampón en primer lugar. Tenía demasiadas dudas y pocas respuestas.

Lo único que tenía claro es que no iba a permitir que este posible mal entendido siguiera en pie por más tiempo. No le gustaba para nada que los demás tuvieran una impresión errónea de él. Mucho menos alguien quién estaba empezando a considerar un amigo.

Iba a llegar al fondo de esto.

𝐇𝐢𝐠𝐡 𝐒𝐜𝐡𝐨𝐨𝐥 𝐒𝐰𝐞𝐞𝐭𝐡𝐞𝐚𝐫𝐭𝐬 | 𝘍𝘢𝘯𝘧𝘪𝘤 𝘑𝘢𝘪𝘥𝘦𝘯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora