Meet Me In Montauk ʚɞ Traducción

ℂ𝕒𝕡í𝕥𝕦𝕝𝕠 𝕀

En la actualidad

Louis abrió los ojos y extendió el brazo para silenciar los timbres de su teléfono. Odiaba despertarse con su alarma. Louis no era bueno para despertarse. Estaba bastante seguro de que hubo un momento en su vida en el que ese no era el caso, pero no podía recordarlo del todo. Su cerebro se sentía nublado, como solía ocurrir cuando se despertaba por primera vez. Louis no podía recordar la última vez que realmente había recordado un sueño. Tal vez ni siquiera soñó, pero siempre tenía la extraña y persistente sensación de que estaba olvidando algo que duró hasta la segunda taza de té.

Era jueves. Los jueves, Louis no necesitaba estar en la tienda hasta el mediodía, por lo que generalmente tomaba sorbos de su té lentamente y se tomaba su tiempo cantando en la ducha antes de salir trotando por la calle camino al trabajo. A Louis no le preocupaba su trabajo, ni un poco, en realidad. Le encantaba estar allí, lo cual era bueno porque era dueño del lugar y de todo.

La querida librería de Louis lleva el nombre, aparentemente, de las mejores playas de Nueva York. No podía entender por qué había sentido que no había otra opción posible sobre cómo llamar su tienda, pero no importaba. Se sentía poético y eso era todo lo que la gente quería en la amigable librería de su vecindario, ¿verdad? Así fue Montauk. Montauk, la pequeña librería con el talentoso barista con los ojos más penetrantes de todo Manchester, el mejor amigo de Louis, Zayn.

Louis no era un barista tan malo, pero consideraba que la mayoría de la gente no venía tanto por el perfecto americano que Zayn servía, sino más bien para fingir que sus educadas sonrisas eran específicamente para ellas.

Sin embargo, no lo eran, porque Louis sabía la forma en que Zayn sonreía cuando realmente lo decía en serio y esas sonrisas estaban en su mayoría reservadas para el otro mejor amigo de Louis, Liam. Los dos habían estado juntos desde que Louis tenía uso de razón. Probablemente desde la escuela primaria, era algo de lo que era difícil identificar el comienzo. Desde que Louis podía recordar, los dos habían estado compartiendo risas privadas y sonrisas tontas y no había cambiado mucho desde que crecieron. Ahora, con los tres acercándose no tan silenciosamente a su cumpleaños número 27, lo único que había cambiado eran los anillos a juego que Liam y Zayn llevaban cada uno en su dedo anular.

Como todo lo demás en su relación, había ocurrido en silencio, sin la opinión del resto del mundo. Se habían ido de vacaciones a Londres hace dos años y habían regresado casados. Sin complicaciones, sin alboroto. Nunca les importó incluir al resto del mundo en su romance, y a Louis eso le parecía bien.

Louis tenía una extraña relación con el mundo del amor... no podía recordar por qué. Ésa fue una gran parte del problema en la vida de Louis. No podía recordar el 'por qué' de muchas cosas. Así como no podía recordar sus sueños, a veces sentía como si hubiera porciones gigantes de su vida que estaban ausentes sin ninguna razón real.

Por supuesto, ninguno de esos sentimientos estaba basado en la realidad. La gente simplemente no olvidaba grandes porciones de su vida. Louis había cambiado. Había cambiado bastante desde el niño cerebrito que se sentaba al frente del salón de clases durante la mayor parte de la universidad, hasta el desertor universitario que había vendido todo lo que poseía, incluido un departamento extrañamente vacío, para comprar una vieja librería. No pensó que fuera algo malo. Era simplemente... un camino diferente. Durante la mayor parte de su vida había pensado que acabaría siendo cirujano. Era para lo que había estado estudiando hasta hace 3 años cuando lo invadió una repentina picazón. Quería salir. Quería alejarse de todo lo que era su vida porque de repente ya no encajaba.

Su familia, Liam y Zayn, habían sido sorprendentemente comprensivos con el hecho de que un día se levantó después de un sueño que, una vez más, no podía recordar del todo, y abandonó todas sus clases sólo tres semanas antes de que comenzaran los exámenes. Sus profesores lo regañaron constantemente durante los primeros meses, pero luego se rindieron. Louis no iba a volver a la escuela y no iba a ser médico.