𝙿𝚛𝚒𝚖𝚊𝚍𝚘𝚗𝚊𝚜 𝙾𝚏 𝚃𝚑𝚎 𝙶𝚞𝚝𝚝𝚎𝚛 [DonatelloxOC] TMNT

cold, cold man

Los han llamado fríos e indiferentes, a los dos. Que parecen más amigos que pareja; algunas personas aún alzaban el entrecejo en asombro si escuchaban a uno u otro referirse como novios.

No necesitaban gritarlo a los cuatro vientos, no necesitaban extravagantes muestras de afecto. Un beso fugaz de despedida, un abrazo repentino, el desliz de algún apodo expresado con casualidad. Un fuego lento latiendo bajo la corteza, con la fiera intensidad de un incendio, silencioso pero no menos cálido.

Ellos lo sabían; no ameritaban la aprobación de nadie más. A solas en el laboratorio, lejos del ruido del mundo, es donde ambos tenían su lugar. Ahí donde nadie podía verlos, estaban contentos. A veces, empero, asaltaba la duda.

Era tarde en la noche ya. Donnie insistía en acabar el programa que estaba codificando para al menos finalizar la versión beta; Jay era incapaz de llevarlo a la cama y optó por sentarse a horcajadas en su regazo hasta que termine o se rinda. Llevaban una hora en silencio; el quedo sonido del teclado y las máquinas alrededor eran el único ruido de ambiente cuando Jay habló en voz baja, el tono rasposo de su voz indicando que el pelirrojo a duras penas seguía despierto.

"Hey, Dee"

El genio residente apartó las manos del teclado, usando una para rodear a su novio de la cintura.

"Te escucho"

"¿Crees que estamos bien así?"

Donnie tardó un momento en responder, extrañado.

"Voy a necesitar un poco más de data para responder eso, querido"

"Me refiero a... sentimientos. Afecto en público. Ya sabes, cosas de parejas normales" Jay pensó en separarse un poco para verlo de frente pero desistió; sus cuerpos encajaban perfectamente, como dos piezas de un rompecabezas. Estaba bien así, con su cabeza apoyada en el hombro de él.

"A veces los escucho hablar, a veces siento que tal vez..."

"Jay."

Donnie tampoco hizo el intento de separarlo. Volteó su rostro con suavidad hacia él, hablándole quedamente al oído mientras paseaba su mano libre por su pelo desprolijo.

"Eres el único que veo. El único con el que vale la pena estar. El único lugar donde vale la pena dormir, es junto a ti"

Jay no pronunció palabra. Ningún gesto suyo delató que haya escuchado; salvo el acelerado latido de su corazón, casi perceptible en el silencio.

Donnie sonrió y siguió hablando.

"¿Realmente crees que necesitamos demostrarles algo a esos tontos?"

"No", llegó la respuesta ahogada.

"Entonces no lo sobreanalizes, mon cheri. Puedo disipar tus dudas siempre que necesites."