primera parte sueño compartido

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a jugar metiendo una y otra vez en la vagina y la otra en el ano, Elizabeth no lo venia venir no sabia si gritar o seguir disfrutando estaba a nada de correrse ni siquiera le importo que fuera a manchar la oficina.
- Belial no te detengas estoy apunto de correrme.
De una manera frenética se lo grito, se lo imploro..
- perfecto avísame cuando te vayas a correr se lo dijo de una manera tan excitado que solo le pudo gritar.
-¡ya!, ¡ya! Me corro.
La dejò de penetrar para bajarse y mojarse y beber de su liquido delicioso para el.
¡toc!, ¡toc!, ¡toc!
- disculpa elizabeth, ¿estas bien?
Una compañera llego a tocarle y sacarla de una experiencia tan excitante.
- si estoy bien, reviso algunos asuntos importantes ¿que necesitas?
Elizabeth le contesto con un poco de enojo pues no la habían  dejado terminar su fantasía.
-la chica de recursos humanos te habla para que firmes unos papeles.
- si dile que ya voy.
La chico cerro la puerta, Elizabeth respiro con fuerza y volteo a ver su entrepierna la cual estaba totalmente mojada de la pena decidió que era mejor irse pues no estaba en las mejores condiciones para estar en la oficina. Tomo su suéter lo coloco en la cadera, agarro su bolso y salio pidiéndole a su secretaria que cancelara todo lo que tenia pues tenia que regresar a su casa por una emergencia.
Belial en el baño con los ojos cerrados y concentrado mientras el agua de la ducha recorría todo su cuerpo un portal perfecto para ellos. seres como el podían manipular varias cosas pero era momento de ir con Dalia.
Ella estaba en la escuela y se dirijia a la biblioteca tenia cosas que investigar en cuanto ella llego se dio cuenta que no había gente ahí para ella era mejor ya que podría estudiar a gusto, se sintió mareada y no le tomo mucha atención siguió con sus libros.
Una voz le hablaba al fondo de uno de los pasillos comenzó un escalofrió por todo su cuerpo, tenia miedo pero tenia curiosidad que era lo que pasaba o quien era, camino lentamente vio una sombra negra empezó a tener un poco de miedo pues estaba sola, su sudor era frio,se detuvo un poco.
- ven ¿no quieres jugar conmigo?
Una voz familiar le hablaba la curiosidad regreso
- pero ¿quien eres?, pregunto con miedo, la incertidumbre creció
- tranquila mi niña soy yo Belial.

MAS ALLÁ DE UNA FAMILIA On viuen les histories. Descobreix ara